La prensa internacional y las vacunas cubanas

Cuba ha apostado todo a sus candidatos vacunales propios contra el coronavirus. La CEO del Roswell Park, en EEUU, está convencida que lo logrará.

Roswell Park Comprehensive Cancer Center en Buffalo, Nueva York, prueba otra de las vacunas cubanas, la CIMAVAX-EGF, contra el cáncer de pulmón, en los EE. UU.

Por estas horas la prensa internacional “resalta el altruismo” de Cuba en rechazar  -por suerte para beneficios de otros- las dosis que le hubiesen correspondido de vacunas contra la covid-19 de acuerdo al programa mundial de vacunas.

CNN, Financial Times y PBS abordan, grosso modo, que Cuba ha entrado en fase III con sus propias vacunas contra el coronavirus, justo en el momento en que la isla ha anunciado que comenzará a probar su candidato vacunal CIGB2020 en enfermos de coronavirus.

PBS entrevistó a Candace Johnson, presidenta y directora ejecutiva del Roswell Park Comprehensive Cancer Center en Buffalo, Nueva York, centro que según ellos “ha trabajado en estrecha colaboración con científicos cubanos para llevar su vacuna contra el cáncer de pulmón a los EE. UU. para ensayos”. Nos referimos a la vacuna CIMAVAX-EGF.

Según PBS, “el notable logro de Cuba ahora lleva a muchos a preguntarse qué otros avances médicos podría compartir con el mundo”, pero la realidad es que no son muchos más que los que ya se conocen.

CNN también mostró la entrevista con Candace Johnson.

Financial Times, por su parte, resalta que “dos vacunas Covid de cosecha propia, Soberana 2 y Abdala mostraron una “potente respuesta inmunológica” en ensayos anteriores y añade que “si tienen éxito podrían ayudar a impulsar una economía sumida en una de sus peores crisis, así como a frenar la pandemia”.

Eduardo Martínez, presidente del conglomerado farmacéutico estatal BioCubaFarma, que supervisa el desarrollo de la vacuna, dijo a periodistas en La Habana que miles de personas habían participado en ensayos anteriores de sus vacunas Soberana 2 y Abdala, que mostraron una “potente respuesta inmunológica” y sin efectos secundarios graves.

Destaca además Financial Times que “los medios estatales han mostrado imágenes de fábricas produciendo miles de dosis de las dos vacunas” y las define como “inmunizaciones convencionales en las que parte de la proteína del pico de coronavirus se fusiona con una molécula portadora para estabilizarla”.

El portal indica que “dos vacunas cubanas más, incluida una administrada a través de un aerosol nasal, se encuentran en una etapa anterior de prueba” y explica que la Soberana 2 ahora se probará en 44.000 cubanos, así como en miles de personas en Irán y Venezuela, ambos aliados de La Habana, aunque México también podría participar potencialmente, según las autoridades, allí y en Cuba.

Cuba, que continuamente ha hablado de “solidaridad” – es preciso destacarlo – no regalará sus vacunas.

Eso sí, vacunó a su personal médico en Venezuela con la vacuna rusa Sputnik V. El personal médico en la isla, incluso ese que está en primera línea de combate contra la pandemia, reza y espera porque el milagro llegue. Que se haga la luz con cualquiera de las dos soberanas.

O con la Abdala. O con la Mambisa.

Sandro Nieto

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