Joe Biden asegura en Miami que él ni es socialista ni comunista

Joe Biden llegó a Miami y dijo, alto y claro, que él no tenía nada que ver ni con el socialismo ni el comunismo. ¿Podrá revertir la intención de voto entre los cubanos de esa ciudad?

Una de las grandes dudas con relación a la campaña de Joe Biden ha sido la relación entre “la izquierda” y el Partido Demócrata. En parte, porque dentro del Partido, figuras como Bernie Sanders y Alessandra Ocasio-Cortez tienen una visión bastante controversial sobre cómo, por ejemplo, debe ser la salud en los EE.UU. Y no solo eso.

El “reconocimiento” que en febrero del 2020 le hizo Bernie Sanders a Cuba, cuando dijo que sería “injusto” decir que “todo había sido malo” en la Revolución impulsada por los barbudos de Fidel Castro, fue una señal para muchos de un peligroso acercamiento en la política hacia “el socialismo” o peor aún, hacia el comunismo. Recordemos que ya los EE.UU. vivió en la mitad del siglo pasado un momento similar y el mal fue cortado de raíz.

También ahora, “la mala hierba” fue extirpada. La campaña de Sanders se vino abajo tras ese comentario y el viejo lobo de Joe Biden vio el camino despejado hacia la Casa Blanca. Bueno, con Donald Trump parado en la puerta.

Los republicanos insisten en que Biden sigue esa línea; o que al menos explícitamente no ha querido desmarcarse de esa visión que muchos tienen, y del presunto vínculo entre grupos de izquierda, el movimiento Black Lives Matter y hasta el extremismo de Antifa, con el Partido Demócrata.

Fue por ello que Biden se llegó hasta Miami, lugar dentro de la Florida con mayores recelos hacia todo lo que “huela” a izquierda, y allí, delante de una multitud que fue a escucharlo dijo que él no tiene nada que ver con el socialismo. Ni con el comunismo.

La visita de Biden se produjo justo tras la salida de un sondeo realizado por la encuestadora Bendixen & Amandi International y el diario The Miami Herald, en la que los electores cubanoamericanos favorecen ampliamente al presidente sobre el candidato demócrata; sí, pero si se cuenta el resto de los votantes latinos y la población en general la intención de voto cambia radicalmente y de manera abrumadora, con una ventaja de 57% a 37% de Biden sobre Trump entre los electores del condado Miami-Dade, el más poblado de la Florida y clave para ganar los 29 votos electorales del estado.

Sin embargo, por si alguna duda quedaba, y claro, siempre podemos argumentar que los políticos prometen lo que luego no cumplen y que en muchísimas ocasiones mienten, las palabras de Joe Biden en Miami este lunes sirvieron para alejarlo del socialismo y el comunismo.

Entre otros muchos puntos, señaló que sus relaciones nunca fueron cordiales con dictadores como Fidel Castro y Vladimir Putin.

“Me he enfrentado a todos esos dictadores que nos preocupan, a los Castro y a los Putin de este mundo… Nunca he tenido una relación cordial con ellos”, expresó.

“¿Yo parezco socialista?”, se cuestionó antes de manera irónica.

El foro público, celebrado en el Pérez Art Museum de Miami (PAMM)  fue auspiciado por la cadena NBC y conducido por el reconocido periodista Lester Holt.

Fue la única referencia al “tema” y sus palabras fueron una respuesta al abogado cubanoamericano Peter González. Este le preguntó cómo pretendía convencer a cubanos y venezolanos de Miami de que votar azul el 3 de noviembre, no significaría un voto por la extrema izquierda y el comunismo y por lo que es peor: un “regreso” para ellos de lo que huyeron.

“No he pronunciado una sola sílaba que haga pensar que soy un socialista o un comunista”, aseveró Biden.

Mientras esto sucedía, inteligentemente, el presidente Trump salía del hospital militar Walter Reed en Bethesda, Maryland y le restaba importancia al discurso de Biden en Miami.

Este último, no se dejó “provocar” y dijo alegrarse por la mejoría de Trump, aunque le sugirió que diera un mensaje “correcto” al país sobre cómo enfrentar la enfermedad.

Le criticó, eso sí, su negación a los peligros que representa el coronavirus.

“Quisiera que comunicara el mensaje correcto al país… Las máscaras salvan vidas y evitan la propagación de la enfermedad, y no se puede decir que no debe temerse al virus. Es muy preocupante, no se puede dar el mensaje de no preocuparse”, dijo Biden respecto a los comentarios hechos por Donald Trump desde la Casa Blanca sobre no dejarse atemorizar por el COVID-19, algo que hizo justo después de, en gesto desafiante, se quitara la mascarilla delante de todos.

Y de las cámaras de todos los medios.

por Ariel P.

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