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Holguín: Dos jóvenes constructores resuelven tupición de 30 años

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“Casi 30 años llevaba obstruida una cuneta que parecía no tener solución”, pero este par de jóvenes constructores pusieron empeño y ganas para resolver el problema. Y lo lograron.

Bajo el título de Hay gente chévereel diario oficialista de la isla, Juventud Rebelde nos trae un caso que “bien vale una misa”, como París. Y es que dos jóvenes, constructores ambos, se dieron a la tarea en Holguín de resolver una tupición de 30 años y la cual, ningún organismo o ministerio le había dado solución durante todo ese tiempo.

Los dos jóvenes constructores decidieron, por su cuenta echar manos a la obra y, según cuenta “con asombro y mucha gratitud, Irán Arencibia Feria, vecino de José A. Cardet No. 250, entre Martí y Luz Caballero, en Holguín,”, ambos solucionaron “un problema antiquísímo“, gracias al deseo de hacer, resolver, “sin que medie burocracia alguna.”

Armados más que nada, de voluntad, los jóvenes constructores resolvieron el viejo problema de la calle Martí, la cual, según cuenta en su misiva Arencibia Feria, se había vuelto intransitable y de difícil acceso, cada vez que llovía (especialmente).

Arencibia relata que los tragantes tupidos y las cunetas obstruidas han estado transfigurado el escenario por donde él y tantas personas caminan a diario, hasta que aparecieron estos dos jóvenes constructores.

Treinta años, sin solución

«Casi 30 años llevaba obstruida una cuneta que parecía no tener solución, pero un par de constructores jóvencitos, pertenecientes a una brigada que laboraba cerca, sin poner peros, resolvieron el problema».

El mérito, además, se lo llevó quien, a pesar de los treinta años transcurridos sin ver solución le planteó el problema a los muchachos.

Dice Irán en la misiva que, apenas los muchachos oyeron del problema dijeron que “estaban para servir”.

«¡Qué grata impresión me han dejado ese par de jóvenes constructores! Cada vez que los veo les digo que hay gente chévere y ellos con sobriedad me responden: ¿Qué tal, señor?».

Aunque el Juventud Rebelde desconoce sus nombres, pues Irán no lo reveló en su misiva, lo que se sabe es que los dos muchachos, “estuvieron laborando en la esquina de Martí y Máximo Gómez casi un mes sin pedir nada a cambio.”

El diario cierra esta nota explicando que José Alejandro Rodríguez, el titular de esta columna, Acuse de Recibo, que durante años se ha convertido en el Santo Patrón de los desvalidos, se encuentre enfermo.

Desde Cubacomenta le enviamos el mejor de nuestros saludos a Pepe, quien durante años no solo ha llevado esta columna, sino que ha dado más solución a problemas que cualquier otro ministro del país.

tal vez quieras leer este artículo, sacado de la columna Acuse de Recibo, el cual tuvo gran acogida entre nuestros lectores: Se buscan dependientas como Claudia

foto: Calle Cardet, en Holguín


 

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