Hasta 100 defunciones diarias se registran en La Habana

Entre 85 y 90 fallecidos diarios, que incluso algunos días pueden superar el centenar, se registran en la capital de Cuba, de acuerdo con un artículo publicado por el periódico oficial Tribuna de La Habana.  El texto refiere asimismo que unos años atrás en un día podían morir 65 personas.

En el sitio digital de Tribuna fue entrevistado Jorge Luis González Haidar, director provincial de la Unidad Presupuestada de Servicios Necrológicos de La Habana, quien explica cómo se enfrentan a la situación actual: “Se necesitan 80 vehículos y nuestra base de trasporte cuenta con 53 altamente sobreexplotados, de los cuales a diario trabajan 45 para diferentes servicios”.

González Haidar admite que hace aproximadamente dos años solo contaban en la capital de Cuba con 25 carros fúnebres, “lo que provocó un gran número de quejas pues no daban abasto”. Se decidió entonces reparar un grupo de estos mismos vehículos, y les entregaron cinco nuevos. “Sin embargo, no podemos desconocer que nuestros medios de transporte acumulan más de 14 años de explotación y sufren roturas diarias. Este 2019 arriba un nuevo lote de carros para mejorar el servicio, aunque no cubrirá toda la demanda”, señala ante las periodistas Lissette Martín y Nayaren Rodríguez.

Servicios Necrológicos de La Habana, según refiere el funcionario, enfrenta además múltiples insatisfacciones por los servicios de cremación y sucesos delictivos en el Cementerio Cristóbal Colón.

Actualmente en la capital del país hay solo dos instalaciones, con cuatro incineradores. A diario se pueden contabilizar entre 40-45 solicitudes de cremación, pero pueden responder solo a 32. “Por ello hemos previsto, para finales de septiembre venidero, situar dos incineradores en La Habana del Este”, aclaró el director provincial de la Unidad Presupuestada de Servicios Necrológicos de la ciudad.

Para luchar contra la profanación de tumbas y el hurto de lápidas y jardineras, González Haidar asegura que la Necrópolis de Colón ha instalado un sistema de vigilancia y protección. “Las cámaras pueden registrar lo sucedido en un período de 2 años”, agrega.