Granma asegura que los “molinos retoman sus ritmos de producción de harina”

El diario Granma brindó hoy más que nada esperanzas a la población cubana a través de sus páginas, al publicar una nota en la que asegura que los “molinos retoman sus ritmos de producción de harina” en la isla.

“Atrasos en el arribo de piezas y agregados de repuesto de los molinos de trigo del país han incidido en el déficit de harina afrontado hace varias semanas en buena parte de la nación”, dice el diario oficial del Partido Comunista de Cuba, dos meses después que las primeras alarmas se dieran en la provincia de Ciego de Ávila.

Al menos el Oriente cubano estaría liberándose del stress en sus hogares con la aparición del bendito pan, gracias al trabajo alcanzado por unidad empresarial de base (UEB) Cereales Frank País García, de Santiago de Cuba, quien ha logrado rehabilitar su proceso tecnológico industrial.

La empresa, asegura el Granma, luego de establecer en el 2016 un récord productivo ascendente a 142 701 toneladas cerró el 2017 con 240 toneladas por debajo del plan, con un declive aún mayor en el 2018. Hasta el cierre de noviembre esa empresa había producido 19 301 toneladas menos.

En el molino santiaguero hubo problemas con los compresores de aire, con los bancos de cilindros, motores, correas y rodamientos, así como falta de accesorios en equipos harineros como desatadores y disgregadores, y en equipos de prelimpieza del trigo, según expresó el director general de la UEB, Waldis González Peinado.

El funcionario señaló que “esas y otras afectaciones” habrían sido las responsables en la “insostenibilidad de la molienda, procesamiento de trigo seco y, desde luego, bajo rendimiento del cereal”. Es por ello que de las entre 397 y 410 toneladas que deberían entregar diariamente apenas promediaban entre 310 y 290 toneladas.

Afortunadamente “a finales de octubre y principios de noviembre comenzó el arribo de unidades nuevas de compresores, motores, bombas de aire comprimido, correas, rodamientos, bandas de elevadores, tarjetas del panel de comando” además de un controlador lógico programable de la línea de Trigo-2. Con las piezas ya en sus predios, la UEB ha comenzado a recupera paulatinamente su proceso productivo y ya hoy están promediando unas 365 toneladas diarias, con lo cual pueden cubrir la demanda del pan y otros productos que contienen harina en los territorios de Guantánamo, Santiago de Cuba, Granma, Holguín y la Empresa Alimentaria de Las Tunas.

El funcionario explicó que “no existe dificultad alguna con el trigo” y tienen priorizados los suministros a las FAR y el Minint, además de otros compromisos contraídos con el Ministerio del Turismo y para la venta en moneda libremente convertible.

En Cienfuegos “los recursos están llegando de forma priorizada, fundamentalmente masas de cilindro para molinar el trigo”, expresó Isbel Vanegas Presno, director de la entidad

“Ello redundará en la consecución de mejores rendimientos y mayor calidad de la harina de un centro como el nuestro, el cual tiene el encargo de producir el 42 % de la harina de trigo del país”, expresa el funcionario, quien dijo que a pesar de los avances, es para el primer trimestre del 2019 que “deberemos tener la totalidad de los recursos en función de hacer los trabajos de mantenimiento requeridos y lograr definitivamente la capacidad productiva y la estabilidad de nuestro molino”, y señaló además que gracias a la cooperación de una nación europea se modernizarán “las operaciones de descargas portuarias, gracias a la cual quedaría solucionado el actual lastre del pago por estadía a las embarcaciones.”