Emojis, ¿un lenguaje que funciona igual para todos?

¿Quiénes usan emojis en Cuba? La Fundación del Español Urgente tuvo a bien elegir emojis como palabra del 2019

Dice mi abuela que esos aparatos van a volver a la gente loca. “Ya nadie habla, todo el mundo está pendiente a los teléfonos. En mis tiempos se mandaban cartas o los enamorados te iban a visitar a la casa, pero esa bobería de ahora no la había visto nunca”, afirma ella a sus 80 años.

Las nuevas tecnologías y el lenguaje multimedia se han apoderado del mundo. Recientemente la Fundación del Español Urgente eligió “emojis” como palabra del 2019, porque “forman parte ya de nuestra comunicación diaria y conquistan día a día nuevos espacios más allá de las conversaciones privadas en chats y aplicaciones de mensajería en que comenzó su uso”.

La Fundación selecciona hace siete años la palabra del año. Escrache fue la del 2013; selfi en 2014; refugiado en 2015; populismo en 2016; aporofobia en 2017; y microplástico en 2018.

Los que usan emojis en Cuba

“Hay tanta variedad de emoticonos que encuentras exactamente las cosas que quieres transmitir sin necesidad de palabras. En ocasiones no sabes cómo expresarte porque el momento es tan intenso que no salen las sílabas de la boca, basta con revisar el teclado y estará justo el sentimiento que necesitas en figuritas”, comenta Melissa.

Los teléfonos inteligentes, las redes sociales y aplicaciones de mensajería tienen incorporados dichos caracteres para agilizar las respuestas de los usuarios.

“Esa es mi manera de comunicarme. Sobre todo porque a veces el ajetreo diario te obliga a decir más con menos, y para eso los emojis son ideales”, declara Liuba.

Julio, de 16 años, explica que entre su grupo de amigos cada miembro se define con uno de estos ideogramas. “En dependencia de las características de cada cual o los gustos que tenemos. Así cuando nos vamos a referir a alguien no es necesario especificar el nombre. Es una manera de mantener nuestras cosas en privado. Además, mantenemos identificado el team: en las redes sociales también se identifica con un emoticono que nos define a todos”.

Para muchos, más que sustituir vocablos, los complementa. “Escribes en la nota todo lo que sientes y en dependencia del impacto que quieras darle escoges el emoji. Entonces, el escrito se complementa y hace llegar la idea con más claridad. Sin segundas interpretaciones”, señala Aniely, graduada de Comunicación Social.

“Agilidad y concisión”, de esas palabras parte su objetivo lingüístico. Los emojis son una manera de que todos podamos decir lo que sentimos sin necesidad de traducciones o lenguas diferentes. Son un posible lenguaje universal.

Vladia Rosa García