Emilio García, el rescatista cubano que salvó a Maradona

Un bombero cubano relató al periodista cubano José Alejandro Rodríguez – o Pepe Alejandro como cariñosamente lo conoce Cuba entera – anécdotas relativas a su profesión como rescatista, entre las cuáles nombró dos muy interesantes: una, haber salvado a Maradona durante un accidente automovilístico que tuvo este saliendo de Varadero; y otra, cómo rechazó unos dólares que quisieron regalarle unos extranjeros a los que él, y un grupo de colegas rescatistas salvaron de una inundación.

Su nombre es Emilio García, con una trayectoria de casi 40 años como rescatista, y actualmente miembro del Destacamento Especial de Rescate y Salvamento de La Habana.

Según su relato, Maradona regresaba a La Habana proveniente del famoso balneario de Varadero cuando su auto se impactó contra otro vehículo.

Salvar al mismísimo astro del fútbol argentino y mundial, Diego Armando Maradona, no estaba entre sus planes cuando Emilio se presentó en el lugar del accidente, en lo que sin dudas se ha convertido con el tiempo no en una anécdota más a contar, sino también una de las más memorables de su carrera como rescatista.

El 10 – D10S, para los argentinos – se encontraba en shock. Y solo a bordo.

Cuando Emilio llegó a ayudarle, Diego se mostró alterado. El típico comportamiento del que siente la muerte cercana y exige más que nada que lo salven. Emilio conoce de cerca ese proceder de aquellos a los que durante tanto tiempo ha socorrido.

Cuenta que lo primero que hizo fue calmarlo. Le preguntó su nombre, y fue ahí cuando escuchó: “Diego” y más tarde un apellido, “Maradona”.

El impacto por tener en sus manos la vida de un hombre que es ídolo de millones en un país como Argentina, y una tierra pobre como Nápoles, en Italia, lo llevó a dudar si era él, el verdugo ante los ingleses en México 86´o no. ¿Era o no era el hombre de la famosa “mano de Dios”? ¿Era o no era aquel que instantes después de haber dejado en el piso a seis jugadores ingleses fue llamado por el mítico narrador argentino Víctor Hugo Cabrera como “barrillete cósmico”; hombre proveniente “de otra galaxia”?

Hasta que no le levantó la manga de su pulóver y reconoció el tatuaje que el argentino se había hecho en agradecimiento al ex gobernante cubano Fidel Castro, que Emilio reconoció que de él, dependía la vida de un hombre considerado por muchos el mejor jugador de fútbol de la historia. El único que ha podido echarse encima un equipo argentino encima y darle un título mundial. El artífice de haber sacado de 2da División en Italia a un equipo de bajo presupuesto como el Napoli y convertirlo en Campeón del Scudetto de Primera División en el prestigioso calcio italiano.

Aunque Emilio no precisa en qué año sucedió el accidente de tránsito, es muy probable que haya ocurrido en los primeros años de la década del 2000, cuando el astro argentino fue llevado a la isla para tratarse su adicción a las drogas; y tiempo en el que Diego empleó para recuperarse, pero además para dejar una descendencia que incluye a tres hijos hasta ahora no reconocidos, pero que Diego espera reconocer pronto tras efectuarse los exámenes de rigor de ADN en un viaje que hará a La Habana próximamente.

Más adelante, en el final de la entrevista Emilio relató otra anécdota que resume grosso modo cómo debe ser un rescatista.

“En una ocasión, salvamos a un grupo de turistas norteamericanos atrapados en un ómnibus, en una inundación muy peligrosa por lluvias intensas en Miramar. Y al final hicieron una recolecta, como pasar el cepillo, en un sombrero, y lo llenaron de dólares para entregárnoslos. Y les dijimos que los guardaran, que lo único que queríamos era que estuvieran bien y felices. Se miraban extrañados y comenzaron a hacerse fotos con nosotros.”