Dos pavos aguardan perdón de Trump por Thanksgiving

Se acerca una tradicional ceremonia en la cual el presidente de Estados Unidos perdona a un pavo que se salvará de la cena de Thanksgiving.

Dos pavos ajenos a su futuro aguardan en un lujoso hotel por el momento en que Donald Trump otorgue el popular perdón por Thanksgiving, que el mandatario le entregará a uno de ellos, aunque al final ambos sobrevivirán a la fecha.

Las aves Corn y Cob estarán tranquilamente alojadas en el hotel Willard hasta el mañana martes, cuando se espera que Trump perdone la vida a solo uno de ellos, como antes han hecho sus antecesores en el cargo.

Como muestra el video compartido por CNN, los dos se encuentran cómodamente hospedados en las lujosas habitaciones de la instalación, como cualquier huésped.

“Son un regalo de la Federación Nacional de Pavos que desde 1947 entrega dos ejemplares a la Casa Blanca. Los pavos viajan en tren hasta Washington, se quedan en hotel hasta la ceremonia, y después ambos serán llevados a una granja en Virginia en donde vivirán un retiro tranquilo”, indica la información.

Incluso en Twitter, la Casa Blanca ha colocado una encuesta que pregunta: “¿Qué pavo debería perdonar el presidente Trump en la Ceremonia Nacional de Perdón del Pavo de Thanksgiving de este año: Corn o Cob?”.

En el caso del primero, es un ejemplar de 42 libras que “ama el fútbol americano universitario y espera visitar la Feria Estatal de Iowa algún día”, mientras Cob pesa apenas una libra menos, y le “gusta jugar al pickleball y quiere ver los monumentos en Washington, D.C”, añade la cuenta en la red social.

El sitio Wizm News entrevistó a uno de los responsables de la Federación Nacional de Pavos, en este caso a Gretta Irwin, quien dijo que “cuando te das cuenta de que solo otros 73 agricultores han tenido la capacidad de tener esa conexión y este honor, es realmente emotivo para la mayoría”.

https://twitter.com/WhiteHouse/status/1330672975906025472?s=20

Pero la selección de los ejemplares no es una tarea sencilla, detalla el medio, pues “no solo deben representar físicamente a la industria, sino que también deben sentirse cómodas al estar rodeadas de personas y pararse en un podio”.

Según explican el actual presidente Ron Kardel y su esposa Susie, “depende del granjero trabajar con los pavos, colocarlos en un podio y asegurarse de que se sientan cómodos con los ruidos y las luces adicionales. Realmente, solo se está tratando de encontrar ese pavo que tenga un gran temperamento y se vea orgulloso”.

No es la primera ocasión en que Trump perdona a pavos por Thanksgiving, pues ha mantenido la tradición presidencial que data de décadas, y en 2019 los agraciados por esta causa fueron Bread y Butter.

Omar Cortázar