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Dos años de cárcel para violador de yeguas en España

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Un hombre en España confesó, finalmente, ser el responsable de agredir sexualmente a dos yeguas y fue condenado a prisión.

Dos años después de que se dieran los sucesos, un hombre confesó ser el violador de dos yeguas en España y aceptó su condena, por hechos que ocurrieron en la localidad mallorquina de Alcúdia, y que dejaron secuelas en ambos animales

De acuerdo con el diario El País, “la noche del 1 de enero de 2018, un hombre de 54 años se dirigió a los establos con la intención de agredir sexualmente a una potrilla de siete meses. El animal tuvo que ser tratado durante varios días por las heridas físicas sufridas en el asalto”.

Después de los sucesos, la dueña de los animales se alarmó por la conducta extraña que esta desarrolló durante las semanas posteriores, y por la inquietud del veterinario, decidió instalar cámaras de vigilancia.

Gracias a estas, pudieron ver al violador de yeguas, quien hasta en tres ocasiones fue observado en el mes de marzo mientras agredía sexualmente a la yegua mayor, que debió igualmente ser atendida debido a las heridas.



Se trata de un caso zoofilia que, según el portal de la Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano, es una “parafilia que consiste en la atracción sexual de un humano hacia otro animal distinto de su especie. Las personas que sienten esta afinidad o atracción sexual son conocidas como zoófilos o zoofílicos, pero también se conocen como zoosexuals o simplemente zoos”.

Ya a finales de 2019, se supo que la fiscalía pedía dos años de cárcel para el hombre de 56 años y nacionalidad colombiana que agredió a la potra “Ketama” y la yegua “Chillines”, además de una indemnización de 968 euros a la dueña por los gastos veterinarios.

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En este caso, en España, “el Código Penal en su artículo 337 habla de penas de entre tres meses y un día y un año de prisión para quien por cualquier medio o procedimiento maltrate injustificadamente a un animal, causándole lesiones que dañen gravemente su salud”, añade El País.

El violador de yeguas confesó recientemente que había agredido a ambos animales con su pene y un objeto punzante, y aceptó la pena final dictada por el tribunal: dos años de prisión y pagar unos mil euros a la propietaria.

En Cuba también se han detectado ejemplos de abuso sexual sobre animales, pues a finales de octubre animalistas lanzaron la alerta sobre un violador de perros en un municipio habanero que abusó de varios canes, a juzgar por las evidentes muestras de violencia física.

No obstante, en la Isla se espera todavía por una legislación que regule la conducta a seguir en estas situaciones, la cual se deba aprobar en este mes de noviembre.

Julio Linares

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