Delincuentes quisieron asaltar a pareja de ancianos cubanos en Hialeah
Cuando se disponían a penetrar en la vivienda habitada por los dos ancianos cubanos, en el West de Hialeah, fueron avistados por la policía.
Una banda de delincuentes fue detenida en las últimas horas en el Condado de Miami-Dade, en lo que parece ser la última de las fechorías que hagan al menos en este 2020: el asalto a una pareja de ancianos cubanos en Hialeah.
Los maleantes, tres miembros de una banda de delincuentes profesionales, intentaron cometer su fechoría en la ciudad que progresa, la de la famosa fuente de agua, pero antes fueron arrestados por la policía.
El arresto ocurrió el pasado martes, en horas de la madrugada, cuando se disponían a penetrar en la vivienda habitada por los dos ancianos cubanos, en el West de Hialeah.
Sin embargo, se pusieron de mala suerte.
Justo cuando uno de los maleantes brincó hacia el patio de la vivienda, y los otros dos caminaban por la calle a la espera de la señal para entrar, una vez que el primero les franqueara el acceso al interior de la casa, pasaba por el lugar un auto de la policía.
El agente percibió la actitud de los ladrones, jóvenes los tres, entre los 22 y los 29 años, que en lugar de ponerse a trabajar intentaron robarle a estos dos ancianos cubanos.
Fue justo ahí cuando cuando comenzó todo; frente a la casa del matrimonio de ancianos cubanos, ubicada en la primera avenida y la 37 calle del oeste.
Los delincuentes venían con todo. Un buen auto, Mercedes Benz color negro y armas, que cuando se formó el corre corre escondieron en los latones de basura de la cuadra.
La policía de Hialeah sin embargo fue más hábil. Se parquearon frente a la vivienda y les cortaron el acceso al auto, así que se les complicó todo.
La pareja de ancianos lleva 50 años viviendo en el mismo lugar. Al contar lo sucedido señalan:
“Abrimos la puerta y estaba lleno de policías. Tenían en el carro como para romper las puertas y las ventanas, si ellos rompen y entran, nos matan”, dijeron a América TeVé, Eva, la señora, y Fernando Álvarez, su esposo.
Los ancianos cubanos presumen que los maleantes, que ahora fueron llevados a la Corte y se les impuso una fianza de ocho mil dólares, los estaban vigilando desde hace algún tiempo, y que esperaron el momento preciso para encontrarlos solos en la vivienda y así hacer las cosas más fácil.
Pero, no contaron con la policía de Hialeah.
Ariel P
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