¿Dónde hay?: cubanos enfrentan el desabastecimiento en grupos de Telegram

Por Vladia Rosa García

Los cubanos intentan sortear la “crisis coyuntural” con grupo colaborativo “¿Dónde hay?” en la aplicación de mensajería Telegram

El Internet se ha convertido en un medio de escapatoria para los cubanos. Algunos continúan utilizándolo para la recreación o el entretenimiento; otros, preocupados por la “crisis coyuntural” del país, prefieren sacarle mejor provecho.

Para nadie es un secreto la escasez en las tiendas cubanas. Varias han tenido que cerrar por la falta de alimentos o mercancías de aseo, situación que se agrava cada vez más debido a la carencia de exportaciones.

La solución parece alejarse del gobierno, que parece no buscar alternativas para satisfacer las demandas de la población. Sin embargo, en la 3G muchos cubanos encuentran respuestas. La aplicación de mensajería Telegram ahora alberga un nuevo grupo colaborativo no institucional llamado “¿Dónde hay?”, para encontrar lo que está perdido.

La plataforma, que actualmente cuenta con 2 580 miembros, solo hace referencia a los centros estatales, especificando el precio del producto y dónde encontrarlo. En su mayoría los interesados se acercan en busca de comida, o artículos de primera necesidad como el papel sanitario y el detergente. Aunque también se aclaran los sitios donde hay medicamentos, sobre todo aquellos que están en falta.

Utilizando el hashtag más el nombre de lo buscado, el usuario puede averiguar si se ha hecho referencia a eso en otras ocasiones. Asimismo se pueden enviar audios e imágenes para facilitar el rastreo.

“Es bueno que haya personas preocupadas por la realidad del país y que se les ocurran cosas así. Por aquí soluciono varios problemas y ayudo a quienes están como yo”, explica Mailyn, miembro del grupo.

“Para mí es lo mejor. Me ahorro estar como una loca caminando por toda La Habana hasta dar con una tienda que esté surtida. Antes encontrabas varios productos en un mismo establecimiento, ahora vas a diez y no hay nada”, comenta Lidia, quien se enteró de la opción por su hijo adolescente.

Esperar dejó de ser una alternativa. Hay que enfrentar las dificultades con los medios que se tienen a mano o de lo contrario no habrá forma de salir de este período incierto. El pueblo sigue esperando mejoras y abastecimiento. Ante las penurias actuales, por lo menos se sobrevive sabiendo dónde hay.