Cuba: solo Guillermo García Frías puede pelear gallos

El gobierno cubano publicó el Decreto Ley de Bienestar Animal con evidentes sesgos: permite las peleas de gallos a las empresas del Comandante de la Revolución Guillermo García Frías, pero amenaza con contravenciones a los demás.

Mientras que los demás ciudadanos sentirán el peso de la justicia por las peleas de gallos -perseguidas por las autoridades en la isla-, el gobierno reitera que autoriza las lidias organizadas por clubes del Grupo Empresarial de Flora y Fauna, bajo el mando del Comandante de la Revolución Guillermo García Frías, las cuales sí son permitidas.

Los animalistas esperaban con impaciencia la salida de la legislación que ayudara en el enfrentamiento al maltrato animal, que se había anunciado como aprobada, pero que no fue publicada sino hasta semanas después. No obstante, lo escrito en algunos de sus puntos ha dejado inconformes a más de uno, porque hay una evidente preferencia por los gustos de personas en las altas esferas del poder.

De acuerdo con el Decreto Ley que se supone vele por el bienestar animal, “el Jefe del Departamento Provincial de Sanidad Animal que corresponda autoriza las lidias de gallos que son organizadas por los clubes gallísticos, pertenecientes al Grupo Empresarial de Flora y Fauna”.

Incluso, son tan “benévolos” con los animales que hasta afirman que la autoridad competente realiza inspecciones durante la lidia, para velar, entre otras cosas, por “la protección de las espuelas para evitar heridas sangrantes o la muerte de los animales”; la “detención del combate cuando uno de los animales ha quedado ciego, tumbado, mal herido o se observen heridas sangrantes”; “la no realización de actos de maltrato físico de las personas hacia los gallos que se encuentran en combate en el interior de la valla o en sus instalaciones aledañas”; y “cualquier otra que afecte la salud y el bienestar de los animales”.

Pero mientras Guillermo García tiene permitido las pelas de gallos, en el Capítulo XI se define -de forma contradictoria-, como conductas infractoras del bienestar animal el hecho de “inducir al enfrentamiento entre animales de cualquier especie”, aunque aclara que toda regla tiene su excepción.

Esta preferencia hacia García Frías no pasó desapercibida por la revista cubana para los amantes de los animales El Arca, que escribió en sus redes sociales:

“Es una falta de respeto aceptar por un lado que se prohíba el enfrentamiento entre cualquier tipo de animales pero que solo podrán hacerlo quienes los ‘organismos pertinentes lo determinen’. ¿Qué burla es esa? Permitir a Flora y Fauna las peleas de gallos. ¿Hasta cuándo se va a justificar el gusto de unos cuántos en enfrentar gallos?”.

Omar Cortázar