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Cuba: denuncian posible estafa que amenaza tarjetas electrónicas

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Con el crecimiento del comercio electrónico en Cuba también aparecen los estafadores que pretenden aprovecharse para robar dinero.

Desde hace días circula en redes sociales la información sobre un posible caso de estafa que amenaza las tarjetas electrónicas de los cubanos. El perpetrador pudiera hacerse de las tarjetas mediante el uso coordinado de las aplicaciones de Transfermóvil y Enzona, empleadas en la isla para las operaciones de comercio electrónico.

“La aparición de capturas de pantalla con chats privados donde individuos se hacen pasar por instituciones cubanas exigiendo datos personales de los usuarios, incendió aún más las redes sociales, en especial Twitter, Youtube y Telegram”, reporta el portal Cubadebate.



Ya en Twitter, el conocido youtuber y emprendedor cubano Erich García había alertado sobre esta misma situación, y el usuario Raidel 1989, respondió en un comentario: “trabajo en Banco Metropolitano, exactamente en banca electrónica y puedo asegurar que el banco nunca jamás en la vida te va a enviar un WhatsApp diciéndote que le des tal y más cuál cosa. Si ven esos mensajes por WhatsApp o por otro medio, ignoren o denuncien”.

Según el periodista Luis Eduardo Domínguez, el estafador contacta mediante mensajería con la persona y le pide número de tarjeta electrónica para enviarle una transferencia, y cuando lo recibe, entonces la agrega a su cuenta de Enzona y solicita el código de verificación que exige la aplicación para completar el proceso.

Como no tiene ese código, aplica el siguiente paso para obtenerlo gracias a otra información que le pide a la víctima: le dice al usuario que ya hizo el pago. Como este no ha recibido nada, lo cual notifica, entonces el estafador le pide que envíe una captura de las diez últimas operaciones para comprobar que la otra persona dice la verdad.

Es aquí cuando pudieran caer las personas en la trampa, pues mediante lo que está pidiendo puede obtener el código necesario para el acceso a Enzona, pues este se toma “de las últimas operaciones que el usuario debe consultar en el cajero o a través de Transfermóvil. La numeración es el resultado ‘del monto de la operación (importe) y los cuatro dígitos que están ubicados después de las letras EZ, dice la información proporcionada para activar la cuenta”, detalla Cubadebate.

El medio añade que “como el atacante ya lo había solicitado desde su cuenta, en la solicitud de las últimas operaciones estará el código que necesita el estafador para completar el proceso. El usuario le envía la captura, y el atacante completa el último paso para hacerse con la tarjeta y así agregarla a su cuenta”.

Domínguez aclara que la estafa de tarjetas bancarias no tiene muchas posibilidades de llegar lejos en las condiciones de Cuba, pero aun así, Enzona les confirmó que se han dado casos de personas que han caído en estas trampas.

“Esta estafa tiene las piernas cortas. Enzona exige un número de teléfono, solo admite IP nacionales (en caso de aquellos que quieran perderse tras una VPN), pero más importante, el atacante debe transferir el dinero a otra tarjeta si quiere disfrutarlo. Por lo que es fácil atrapar al estafador”, escribe.

Algunos en redes sociales, en comentarios a Erich García, han escrito que parece una cosa de tontos caer en estos trucos, pues el mensaje en cuestión tiene hasta faltas de ortografía, pero el emprendedor advierte que muchos cubanos no tienen toda la preparación necesaria para entender estos fenómenos y sugiere “que se tenga extremo cuidado de a quién le das esos datos”.

Omar Cortázar

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