Cuba: Una “mujer misil” le rompe el parabrisas; ahora nadie se hace responsable

¿Y quién responde por los daños de esta “mujer misil”? Ha golpeado a embarazadas, y hasta rompió un cristal en una oficina de ETECSA. Ahora anda suelta en la calle nuevamente.

Bajo el título de “Una mujer misil suelta en Las Tunas”, una internauta identificada como Odalys Leyva Rosabal nos trae desde Facebook el caso terrible que le sucediera a su esposo, y que muestra entre otras cosas el nivel de indefensión al que se ve expuesto un ciudadano cubano “común y corriente”, cuando su auto es vandalizado por una persona al parecer esquizofrénica.

Dejemos que sea la propia Odalys quien narre lo sucedido. La joven sin dudas ilustra muy bien cómo está “El Macondo” en la isla, donde nadie se hace responsable por los actos de una persona que padece algún tipo de trastorno psiquiátrico; así que el afectado tiene que simplemente “chuparse la mandarina”, aunque en este caso más bien es una toronja, o un limón. Y bien ácido.

“El miércoles pasado mi esposo fue a una reunión de Transporte, la empresa donde trabaja. Estacionó nuestro carro en la piquera de la Terminal de Ferrocarril, entró a la oficina y una loca le rompió el parabrisas”, comienza su narración Odalys.

“La policía la detuvo, cuando fuimos para la Unidad Policial llamada como “La Tercera”, los policías y oficiales me dijeron que ella no tenía Responsabilidad Legal por su problema de locura. Que llenarían los documentos pero que no tuviera esperanza,”continuó Odalys su relato.

“Entonces yo pregunto: Ella no tiene responsabilidad legal, pero ¿ y las instituciones que la tienen en la calle no la tienen? Estás instituciones tienen Responsabilidad Jurídica por lo tanto alguna debe pagar,” se preguntó con justeza.

“En ese momento todavía estábamos en Etapa de pandemia ¿Qué hacía una loca, borracha y sin nasobuco en las calles de Las Tunas?,” volvió a cuestionarse la mujer, justo antes de hablar de la parte dolorosa de este asunto: la parte económica.

“Un parabrisas traído de Rusia puesto en la casa cuesta casi 500 dólares. Para cualquier persona de otro sitio lo verá como el salario de un mes pero aquí es casi el de un año. ¿Entonces me tengo que sacrificar yo? ¿ Una institución puede ser acusada por una persona natural?”, se vuelve a preguntar la mujer visiblemente molesta.

Luego dice que “la mujer misil ha maltratado embarazadas” y que además “rompió un parabrisas de Etecsa.”

“En ocasiones anda semidesnuda. ¡Nadie ve esto! La noticia de última hora es que ya está suelta,” para luego sentenciar:

“Tenga temor no ande por los alrededores del hotel Ferroviario puede recibir una pedrada y ser hombre muerto”.

Y sí, una pedrada en la cabeza puede matar a una persona. Un golpe a una embarazada puede provocarle la muerte a ella y a su bebé.

Entonces, la pregunta flota en el aire y el Ministerio de Salud de Cuba debería al menos responder por ella.

¿Quién se hace responsable por los daños de esta “mujer misil”?

En los comentarios debajo se aprecia en toda su magnitud la verdad. Incluso, una le comenta que ella también fue agredida por la mujer.

Esta denunciante está atada de pies y manos en un país donde casos como estos muestran lo débil de la justicia. Lo correcto sería que el Ministerio de Salud se hiciera responsable y pagara por el parabrisas del auto roto. ¿ O no?

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