Un mar de sargazo cubre las costas de Guanahacabibes, en Pinar del Río

Un mar de sargazo – literalmente – ha llegado a las costas de la provincia de Pinar del Río y las alarmas se han disparado.

Como si no bastara con la llegada a su territorio del temible caracol africano, la provincia de Pinar del Río, o al menos su icónica Península de Guanahacabibes vuelve a ser noticia en la prensa nacional, con la presencia de otro “peligro”, pero en sus costas: el sargazo.

Un mar de sargazo – literalmente – ha llegado a las costas de esta provincia y las alarmas se han disparado. Esta alga marina no solo erosiona las costas y “se roba” la arena, sino que además es responsable de la muerte de algunas variedades de la fauna marina.

De acuerdo con el reporte del periodista Ronald Suárez Rivas publicado en el diario Granma, Guanahacabibes sufre la «invasión» de sargazos desde el año 2015. El periodista asegura que el incremento es “significativo”, y que en dos ocasiones “ha llegado a provocar la muerte masiva de peces”.

Según el criterio de Lázaro Márquez, director del Parque Nacional Guanahacabibes, “no existe un criterio definitivo sobre las causas de este fenómeno” – el del incremento de los mares de sargazo en la provincia – y explica que “entre las hipótesis que se manejan está la de que se debe a la elevación de las temperaturas producto del cambio climático. Otros investigadores consideran que se encuentra relacionado con alteraciones en el patrón de distribución de las corrientes oceánicas y los vientos predominantes, y también hay quienes lo relacionan con el incremento de los nutrientes que llegan al mar a través de los ríos, incluyendo fertilizantes nitrogenados“.

El especialista asegura que el sargazo está afectando “los procesos relacionados con especies como las tortugas marinas, (…) los arrecifes coralinos y los pastos marinos, dos de los ecosistemas más importantes para el desarrollo de la vida bajo el agua.”

“En lo que va de 2019, el monitoreo sistemático ha permitido determinar la aparición temprana de grandes volúmenes desde el mes de febrero, lo cual no tiene precedentes en años anteriores, con un incremento alarmante en sitios donde no se había reportado, particularmente en el sector litoral extendido desde La Bajada hasta Cabo Corrientes”, explicó el funcionario quien además revela un detalle que tiene hasta ribetes de escándalo: en algunas playas de la península, se han formado bancos de hasta 1,4 metros de alto. Ello, evidentemente, obstaculiza la llegada de las tortugas que salen del agua y caminan hacia la arena para anidar.

Es tanto el sargazo que ante la imposibilidad de removerlo del todo “han optado por abrirle brechas de alrededor de dos metros de ancho a los «muros» de sargazo, a fin de que los animales puedan entrar a depositar sus huevos y volver a salir.”

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