Seguridad del Estado vuelve al chantaje con fotos y desnudos

¿Se habrá arrepentido la Seguridad del Estado de publicar unas fotos de Claudia Genlui donde esta aparece desnuda? ¿Se habrán sentido “horrorizados” por incurrir nuevamente en lo mismo? ¿O simplemente se trata de un chantaje?

Tal parece que ha sido lo último. Una confesión de pruebas de “te tenemos, muchachita”, según cuenta hoy Claudia en su perfil de Facebook.

La curadora, artista y novia del también artista Luis Manuel Otero Alcántara reveló esta mañana que “en la noche del 21 de septiembre fue tirado por debajo de la puerta de mi casa un sobre amarillo sellado que contenía 15 fotos personales”. Fotos que “habían sido enviadas por WhatsApp a mi novio el artista  cuando se encontraba fuera del país en enero de 2019 y que eran parte de una conversación íntima (ciber sexo)”, profundiza en su análisis la joven.

“Hoy 23 de septiembre quiero denunciar la última violación que he sufrido por parte de la Seguridad del Estado Cubano”, comenzaba así esta especie de declaración de principios en su perfil personal de Facebook.

“Evidentemente están tratando de intimidarnos,” expresó más adelante la joven y dijo:

“Quiero que quede algo bien claro: yo Claudia Genlui soy un ser humano libre y mis preferencias sexuales o las de mi pareja son parte de nuestra intimidad. Nada ni nadie tiene el derecho de invadirla…”

Instantes después, Claudia acusó al gobierno cubano “no solo de violar nuestros derechos más elementales (libertad de expresión, libertad de movimiento, libertad de expresión artística, etc.), sino también su actitud homofóbica e invasiva, sus manipulaciones y amenazas realizadas de la manera más cobarde posible, siempre desde el desprecio y suciedad que caracteriza esas “identidades anónimas”. Confieso mi preocupación no solo por la desprotección legal que tenemos todos los activistas por los derechos humanos en Cuba, sino también por las acciones que lleva a cabo el gobierno para neutralizar (supuestamente) nuestro alcance en la sociedad y que repercuten en nuestras familias, amigos y compañeros de trabajo estén o no relacionados con nuestros ideales…Hago responsable al gobierno cubano de cualquier daño físico o psicológico que puedan sufrir estos seres cercanos”.

La joven dijo sentirse “indignada” por el chantaje.

“Pero más que eso, hago pública mi condición actual de presentar fuertes daños psicológicos por el acoso y presión a la que me ha sometido la Seguridad del Estado cubano en los últimos tiempos. Soy una mujer que se siente violada en todos los sentidos posibles y desamparada ante un régimen dictatorial que nos manipula y somete”, aclaró.

Instantes después, colgó un video en el cual explica con mayor lujo de detalles lo sucedido.

Ante esta evidencia y denuncia contra la Seguridad del Estado, ¿tiene algo qué decir el Ministerio de Cultura? ¿CENESEX? ¿La FMC?

por Ariel P.

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