Cuba: Retroceden territorios en su lucha contra la covid-19

Varios territorios cubanos como La Habana, Matanzas, Villa Clara, Santiago de Cuba y Guantánamo, presentan una situación muy compleja con el coronavirus.

El viernes último, el gobierno cubano decidió, siguiendo indicaciones del Ministerio de Salud Pública, que cinco provincias retrocedieran en la fase de recuperación del coronavirus, debido al aumento y diseminación de los contagios en el país.

La Habana, Matanzas, Villa Clara, Santiago de Cuba y Guantánamo fueron los territorios que tuvieron que retornar a fases previas de la recuperación; mientras que las provincias Pinar del Río, Mayabeque, Artemisa, Las Tunas y Camagüey se mantuvieron en sus respectivas fases.

Precisamente en Camagüey, se reforzaron las medidas para enfrentar la pandemia del coronavirus, a pesar de encontrarse el territorio en la etapa de nueva normalidad. Allí se refuerzan acciones para no retroceder de la tercera fase post-COVID-19.

En la más oriental de las provincias, Guantánamo, se retrocedió a la fase II de la recuperación. Dos municipios pasaron a la fase de transmisión autóctona limitada y un tercero a la fase I de la recuperación, lo cual habla a las claras del complejo panorama que se vive en el territorio.

En Santiago se suspende el transporte de 7:00 pm a 5:00 am del día siguiente

No muy lejos de allí, en Santiago de Cuba, como resultado del negativo comportamiento epidemiológico, el territorio retrocedió a la segunda etapa en la recuperación, con el municipio cabecera en la primera, de acuerdo con el reporte de la TV oficial.

La incidencia de casos confirmados en los días recientes, especialmente en el Consejo Popular Santa Bárbara, uno de los más populosos de la urbe -con una transmisión de 39 enfermos y el confinamiento de más de cuatro mil personas en unas 23 manzanas- han paralizado los centros educacionales y de servicios.

En la urbe santiaguera se procedió a tomar medidas drásticas en el transporte público y en establecimientos gastronómicos, con el objetivo de evitar aglomeraciones de personas.

La provincia por más de seis meses se mantuvo sin confirmar casos positivos de coronavirus, pero el repunte de semanas recientes obliga a contrarrestar los efectos de las violaciones de las normas epidemiológicas por parte de residentes y viajeros -además de familiares y vecinos- que han regresado al país.

Las medidas de emergencia tomadas en la provincia incluyen toque de queda y severas multas. Estas entrarán en vigor a partir del próximo martes, a las 12 am.

Son en total 38 las disposiciones aprobadas y firmadas por el presidente del Consejo de Defensa Provincial, Lázaro Expósito Canto, y la gobernadora de la provincia de Santiago de Cuba, Beatriz Johnson Urrutia.

El toque de queda prohíbe la circulación peatonal y de vehículos, tanto estatales como privados, a partir de las 7 pm y hasta las 5 am. Personas que sean sorprendidas en ese horario, deambulando sin justificación por la calle, serán multadas por las autoridades de la Policía Nacional Revolucionaria y el Ministerio del Interior, por violar el Decreto Ley 14/2020. Este contempla hasta 3000 pesos de multa para quienes violen las indicaciones de salud.

Actividades suspendidas

En Santiago de Cuba han quedado suspendidas las actividades recreativas, así como el funcionamiento de centros nocturnos, cabarets, salas de fiestas, discotecas, clubes, cines, piscinas, playas, teatros, joven club, gimnasios y instalaciones deportivas. Los parques infantiles también han sido cerrados.

De igual modo, y en consonancia con esto, quedan prohibidas las fiestas privadas con aglomeración de personas.

Las visitas a los hospitales han quedado prohibidas y se vigilará el uso incorrecto de la máscara protectora.

Los establecimientos gastronómicos como restaurantes o cafeterías, tanto privados como estatales, solo podrán funcionar a un 50% de su capacidad y podrán ofrecer alimentos para llevar solo hasta las 5 de la tarde.

El curso escolar no será interrumpido, a no ser en los casos de aquellos centros de estudio cuyos trabajadores o estudiantes hayan sido contagiados o sean sospechosos de COVID-19. En el resto, se continuará como hasta ahora, exigiendo “con el máximo rigor, las condiciones higiénicas y el cumplimiento de los protocolos sanitarios para educandos, maestros y familiares”.

Roberto A.

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