Cubadebate quiso engañarnos, y Randy Alonso nos debe otra disculpa

Apenas unos minutos después de que el portal Cubadebate publicara “el lamento” del Ministerio del Interior con relación a la muerte de un joven cubano en Guanabacoa a manos de un oficial de la PNR, aparecieron como comentarios debajo de la noticia 27 “respuestas ciudadanas” que coincidentemente -todas- respaldaban la actitud del policía en el caso del asesinato del joven.

El procedimiento no es nuevo, y Randy Alonso, gestor principal de esta plataforma en la isla lo sabe. Quienes han trabajado en Cubadebate y quienes aún trabajan ahí lo conocen. Se coordina la salida del artículo para una determinada hora por parte de Cubadebate, lo cual le da tiempo al Departamento de la Verdad Ideológica a organizar su tropa de ciberguerrilleros para que estén listos, con su “documento de defensa” ya preparado para copiar y pegar debajo de la noticia. Del otro lado, en Cubadebate, un moderador está preparado para APROBAR esos comentarios.

Lo “curioso” de este modus operandi, que conozco de primera mano desde hace años, es que en casos así a los moderadores de Cubadebate se les orienta que deben “APROBAR” esas “respuestas rápidas” sin mirar o leer lo que esos comentaristas expresan, y muchas veces, como otras veces ha sucedido, aprueban comentarios MUY DELEZNABLES que si los hubiesen leído a la primera, no hubiesen aprobado ni de coña, como diría un español.

“Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social”.

Así se anuncia Cubadebate, pero lo sucedido este sábado tras la publicación del lamento del MININT es todo lo contrario.

Sobre eso, ya escribimos un artículo; pero es bueno recordar que entre esos primeros 27 comentarios -todos apoyando la actitud del policía, policía que mató de un disparo a un joven- habían algunos que llamaban a la víctima “lacra”, “delincuente”, “alimaña”, y había hasta uno que decía que “merecía morir”.

Cubadebate quiso engañarnos, y Randy Alonso nos debe otra disculpa. La Unión de Periodistas de Cuba deberá responder también por esta falta de civismo y decencia. La justicia cubana deberá sancionar a quienes permiten que semejantes comentarios se expresen en un portal público y queden expuestos a los ojos no de 11 millones de cubanos, sino del mundo entero.

Al menos tres periodistas oficialistas, Francisnet Bueno, del diario Vanguardia, de Villa Clara; Giusette León García, matancera, periodista de Cubasí; y Arnaldo Hernández, matancero, periodista del diario Girón, cuya fidelidad al sistema revolucionario socialista y fidelista está fuera de toda discusión, expresaron su rechazo a la publicación de semejantes comentarios en el portal Cubadebate contra la víctima del hecho.

Esperamos que el Sistema de Justicia de Cuba limpie esta mancha. Esperamos la disculpa de Randy Alonso o hasta su renuncia. Cubadebate debe dejar de poner en práctica esta modalidad del “comentario express” coordinado con el Departamento Ideológico del Comité Central; ese Departamento que se encarga de contener y soltar, a cada rato, a sus ciberguerrilleros mal preparados pero instruidos para combatir con ofensas en las redes.

Ofensas que incluso profesan contra los muertos.

por Roberto A.

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