Cuba
Peso cubano se desvaloriza con subida de precios
Que el cubano ahora tenga que pagar $70 y $80 pesos por una libra de carne de cerdo – tres bistecs – constituye a todas luces una desvalorización de una moneda que, ahora mismo mantiene su proporción de 25 a 1 en las llamadas Casas de Cambio, CADECA, y también – por ahora – en el mercado informal de la calle. De ello da muy buena cuenta el destacado economista Pedro Monreal en una serie de tuits que dada su “longitud” decidimos resumir aquí.
Según Monreal, lo peligroso no es que el precio de la carne de cerdo haya subido, sino que la tasa de cambio real del peso cubano se mantenga en el 25 a 1. Peor aún, y es lo que la realidad indica: otros productos también pudieran ver incrementado su valor debido a la consabida ley de la oferta y demanda, tan desproporcionada esta última en Cuba.
Si ello ocurre, si digamos el precio del cartón de huevo se dispara hasta los $8 CUC, un porciento del dinero que se destinaba para la compra de este artículo y otros, que pudieran sumársele, como el aceite – digamos – “el bolsillo” tendrá que cubrir esa diferencia, lo cual no es otra cosa que una devaluación REAL del peso.
Por supuesto que también el dólar y el CUC, irán arrastrados pues la tasa se mantendría igual, al menos oficialmente. Si la pretendida unificación monetaria alguna vez tuvo intenciones reales de llegar, hoy está más lejos que nunca.
Si CADECA mantiene su tasa constante, pero Ud. tiene que desembolsar $20 pesos más – o $30, según conocemos sucede ya en algunos lugares – por una libra de cerdo en moneda nacional, ello generaría una estimulación a la utilización del dólar en mercados externos y por supuesto, a desestimular a la población a convertir legalmente en las llamadas CADECAS, el dólar a peso.
Para evitar el desbalance entre el llamado precio nominal y el relativo, los mercados recurren a una medida básica: la de incrementar la tasa, que en el caso de Cuba supone otro apretón más en el cinto. Se supone que eso es lo que deba ocurrir si se quiere evitar el llamado “mercado paralelo”.
Pero mientras el Estado no ajuste esa tasa, los particulares sí que lo harán. El perjudicado será siempre a la larga el consumidor, que ahora tendrá que pagar a razón de 30, 35, o hasta 40 x 1 las cosas que antes podía adquirir con 1 CUC.
A ciencias ciertas no se sabe si la crisis llegará a los extremos del llamado Período Especial en el que el dólar – CUC o chavito – se compraba a $125 pesos.
