Nueva Zelanda: Rescatan del mar un bebé que flotaba milagrosamente

Medios de Nueva Zelanda, Australia y del mundo entero no se explican aún cómo fue que un bebé de apenas 18 meses de edad pudo escapar de la muerte y mantenerse a flote y respirando sobre las inquietas aguas de una playa luego de escaparse de la tienda de campaña donde dormía junto con sus padres.

La criatura se despertó y atravesó una franja de arena hasta terminar en la playa, y de ahí mar adentro, flotando sabe Dios cómo, hasta que fue encontrado por un pescador milagrosamente.

El hombre dijo a los medios que vio algo que flotaba y que al acercarse descubrió que era un bebé. Tras el susto vino la alegría: ¡el bebé aún estaba vivo!El hecho tuvo lugar en la playa de Matata, Nueva Zelanda.

Gus Hutt, el pescador que rescató al infante – identificado luego como Malachi Reeve – confesó que en un inicio él pensó que se trataba de “otra cosa”. El hombre se había desviado unas millas del curso normal que suele seguir todos los días cuando divisó lo que creyó era un muñeco flotando sobre el agua, y decidió acercarse a ver que era.

El infante, de 18 meses de edad, se encontraba de costado, con el costillar hundido y su nariz “a flote” respirando. ¿Cómo fue que pudo mantenerse a flote? ¿Cómo fue que encontró esa posición? ¿Cómo pudo permanecer quieto? ¡Nadie se lo explica!

Tampoco su madre, Jessica Whyte, puede explicarse qué pasó, cuando el gerente del campamento al que había ido de paseo con su esposo y su pequeño hijo la despertó para decirle que su hijo había sido hallado flotando en el mar por un pescador de la zona.

La carpa, dijo Whyte, estaba cerrada. Así que el bebé de algún modo descorrió el zipper y se fue hacia el agua.

“Ese bebé tuvo mucha suerte o simplemente no era su momento de irse”, le confesó el pescador al New Zeland Herald.

Jessica dijo posteriormente que cuando fue despertada ella sintió cómo su corazón se paralizó.

Malachi se había escapado de la tienda de su padre en el campamento de vacaciones de Murphy alrededor de las 7 am del viernes por la mañana. La madre confirmó que usualmente el bebé duerme hasta pasadas las 8am. Según ella el sonido de las olas podría haberlo despertado.

La mujer confirmó que el día antes él había intentado varias veces correr hacia el mar pero ellos se lo habían evitado. ¿Acaso algo lo llamaba desde el misterioso océano?

Whyte dice haber visto lágrimas en el rostro del pescador al cual ahora, todos tratan como un héroe.

Según su testimonio, asegura que le dio un gran abrazo y un beso al hombre que salvó la vida de su hijo, mientras reconoce que a partir de ahora algunas personas la juzgarán porque su hijo escapó de la tienda.

“Nosotros no lo dejaríamos correr al agua por su cuenta. La gente puede tener esos pensamientos [críticos]. Pueden pensar que somos malos padres, pero no lo somos.” 

Ella, sin embargo, asegura haber aprendido la lección:

“Cierren sus tiendas bien, y pónganle al zipper un candado”.