Ni Tarará ni hoteles; locales en desuso para albergar damnificados

Dos de las propuestas que parecían “más lógicas” como solución al problema habitacional generado tras el paso de un tornado por La Habana el pasado 27 de enero que dejó a miles de personas sin hogar, no prosperaron al parecer y el Estado cubano ha decidido echar mano a “locales en desuso” como solución temporal para esas familias.

Varias personas a través de las redes sociales, muchas de ellas vinculadas al periodismo en la isla, artistas, activistas y voluntarios habían propuesto que se hiciera un levantamiento de las personas más necesitadas y se les diera definitivamente la propiedad de varias casas en Tarará que fueron utilizadas para albergar a sobrevivientes de la catástrofe de Chernobil y que ahora se encuentran cerradas y algunas de ellas deteriorándose.

Otros, habían propuesto que las personas fuesen llevadas a algún hotel “habitable“, propiedad del estado, y que se encuentran cerrados en espera de algún tipo de financiamiento para serles devuelta su vida “hotelera”.

Sin embargo en la última de las reuniones de ministros efectuada, prevaleción como solución una vieja solución que antaño se ha utilizado ante problemas similares.

Se trata de espacios que por algún motivo u otro se encontraban cerrados y que ahora se adaptarán a funciones “de hogar” para suplir las necesidades de al menos 372 familias que perdieron sus hogares – derrumbes totales – y que ahora viven en albergues o en casas de familiares o amigos. En total son 3178 viviendas con afectaciones, según señala el portal Cubadebate.

Sin embargo hay que tener en cuenta que, algunos de esos locales fueron concebidos como espacios para oficinas, y la adaptación deberá incluir baños para varias familias y división de espacios.

Otro aspecto importante a resaltar es que aún no se ha efectuado un levantamiento completo del daño dejado por el tornado en el fondo habitacional de los municipios afectados, por lo que la cifra de “evacuados” deberá aumentar en los próximos días.