“La mudita” del 31: ¿dónde comprar la ropa para fin de año en Cuba?

Para lucir bien este fin de año, muchos cubanos compran la ropa aprovechando los descuentos en los negocios privados

“¿A qué cubano no le gusta presumir?”, me dijo. Bajo esa premisa y haciendo gala de su indecisión, compró buena parte de los vestidos en oferta. Como muchos, Yamilet cree bueno comenzar el 2020 con ropa de estreno. Con ese fin salió, como muchos, a comprar “la mudita” del 31.

Los particulares son la opción más socorrida. Boutiques y puntos de venta privados multiplican sus ingresos diarios en la medida que a 2019 le queda menos tiempo. Dania trabaja en una tienda de ropa sita en la calle L esquina a 25, en el Vedado capitalino. El pequeño centro de moda, con sus respectivos descuentos a los distintos grupos etarios, es uno de los preferidos por quienes buscan un modelito a estrenar.

Según nos cuenta, “los clientes masculinos vienen en busca de camisas de vestir o blazers, mientras las mujeres buscan vestidos amplios –una nueva tendencia-, monos enterizos largos y zapatos de tacón en su mayoría”, nos explica la joven.

Los colores favoritos son los “tonos claros, predominantemente blancos. En años anteriores, las compras se disparaban especialmente con el color negro como expresión de elegancia. Al parecer, esa concepción de la moda ha ido variando un poco”, finaliza.

Eimy es estudiante de la Facultad de Medicina del Hospital General Calixto García. Para ella y sus amigas, esta tienda es la indicada “porque en ella encuentran ropa de calidad a precios no tan exagerados, algo prácticamente imposible en los establecimientos estatales. Además, los rebajas para estudiantes resultan muy ventajosas”.

La venta de ropa por encargo es otro de los negocios crecientes. Kelly es la reina de las tiendas virtuales que se gestan en Cuba. Desde el reparto Los Pinos, la joven administra KUKY´s, uno de los grupos de venta de WhatsApp más exitosos de la capital.

Aunque también tienen productos en existencia, la joya de la corona es “la compra por catálogo a precios muy competitivos. Trabajamos directamente con la tienda virtual Shein y, al ser primera mano, los clientes obtienen prendas por el precio tope de 40 CUC”.

Las féminas han disparado el número de pedidos por estas fechas: “Dado el volumen de los encargos, estamos teniendo algunos atrasos en las entregas, que generalmente se hacen 15 días después de realizada la solicitud. Nuestras clientas conocen el proceso regular y por ello encargaron en los primeros días del mes; quienes no lo hicieron, compran mercancía en existencia. A día de hoy, hemos sobrepasado los 3000 CUC en ventas”, asegura Kelly.

Los hay que prefieren la garantía y esperan hasta el último minuto las rebajas de fin de año. Si bien no se realizan en todos los establecimientos estatales, en ciertas tiendas del hotel Manzana Kempinski sí. De ellas, Mango tiene una buenísima relación calidad-precio, y Rocío lo sabe bien: “La tienda, regularmente, hace sus rebajas. En liquidación, puedes encontrarte una prenda en más del 50 por ciento menos de su valor original. No es para ir todos los días, pero para una ocasión especial, vale la pena”.

Como siempre, hay quienes aguardan por un paquete del exterior o recurren al armario de la vecina pudiente. Mas una de las opciones más aplaudidas últimamente son las ventas de garaje.

Y es que cada vez son más los proyectos de este tipo, liderado por jóvenes, en nuestro país. En muchos casos, el concepto de “segunda mano” no implica una menor calidad en la vestimenta, solo abarata el costo. Por lo general, el precio tope de estos eventos es de 10 CUC. Por este motivo, quienes tienen menos posibilidades económicas se acercan a ellas.

Aunque no muy convencido, Luis Ángel lo hizo. Para su sorpresa, encontró no pocas piezas a estrenar. Camisas con modelos llamativos, jeans y pantalones de vestir fueron solo algunas de las prendas que allí obtuvo. “Ahora solo debo preocuparme por comprar los zapatos, pues lo demás lo tengo y por muy buen precio. Para mí, el concepto de estrenar significa usar por primera vez yo, ponerme ropa que la gente no me conozca”.

La adquisición de ropa y calzado en las tiendas estatales es uno de los principales problemas de los cubanos. La baja calidad de los productos, los altos precios y el deterioro son factores determinantes que hacen a los nativos preferir las ofertas de los negocios privados.

Texto y foto: María Carla Prieto