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Cuba

Miguel Borroto no entiende, pero pide disculpas a Portuondo

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El manager de Camagüey Miguel Borroto le pide disculpas a Pedro Portundo, pitcher de Santiago de Cuba que dominó a los Toros, pero se justifica diciendo que él habla así.

¿Acaso es obligación de todos entenderte o modificar la conducta porque tú eres así, Borroto? ¿No crees que debe ser al revés?

En Cuba hay tremendo “revolú” armado por culpa del antipático Miguel Borroto y el lanzador santiaguero Pedro Portuondo. La culpa de todo la tiene el primero, que no es la primera vez que tiene problemas y causa problemas porque hablando es como un arado soviético, aunque él mismo lo reconoce.

De hecho, no ha reconocido que se equivocó ahora. Dice que él habla así, que no quiso ofender al joven santiaguero y -al menos por una vez en su vida- le pidió disculpas al pitcher indómito.

Su frase de  “no entiendo el revuelo que se ha formado” explica a las claras que a la par de su ego inflado estáf su poca capacidad de raciocinio a la hora de entender otra cosa que no sean bolas y strikes.

El manager Miguel Borroto pudiera sin dudas ofenderse si, por ejemplo, Higinio Vélez le llamara “managercito”, pero sería incapaz de entender que el calificativo despectivo de “pitchercito” que usó contra Portuondo y que a muchos sonó ofensivo, es más o menos lo mismo. Porque, ¿qué diferencia hay entre “managercito” y “pitchercito”? Ninguna, en verdad. Aunque no fue solo eso…

Lo que sucede con Borroto, y que a cada rato sucede con Borroto, es que su ego y poca capacidad para entender que las sociedades se transforman, que el lenguaje evoluciona, que existe una evolución constante en el pensamiento, se lo come a cada rato por una pata cuando comienza a hablar y se cree que todos los contextos son iguales.

¿Recuerdan el volcán que se le formó a Yuli Gurriel tras el gesto de “chinito”, tan natural en Cuba, que ofendió al pitcher Yu Darvish y a toda la MLB y fanáticos en EE.UU.?  Así son las cosas. Los contextos, las épocas, los lugares, algo que Borroto se empeña en no asumir.

Documentadas están las tantas veces que ha metido “el delicado pie” con su lengua, y la gente está, desde hace rato, que no le deja pasar una pesadez. Porque sí, el hombre es pesado. O al menos lo parece, pues a cada rato ofende con lo que dice.

Al parecer “alguien” ahora, le haló una oreja y el agramontino ha salido a pedir disculpas pero, poniendo “peros”. Si algo les molesta a esta gente que creen firmemente ser el quinto punto cardinal es eso: disculparse.

¿Qué dijo el director de los Toros?

Fueron los administradores de la página de Facebook de los Toros de Camagüey quienes conversaron con Borroto, y este señaló: «No entiendo el revuelo que se ha formado por una simple manera de decir que utilizo siempre con mis muchachos. A Portuondo le di un abrazo justo antes de entrar a esa conferencia de prensa y lo felicité. Si él no entendió mis palabras y se sintió herido le pido disculpas y le ratifico mi respeto”.

El timonel de los agramontinos, sin embargo, se metió nuevamente en la pata de los caballos al reconocer y “justificarse” que a su segunda base, lo llama “mi segundita”.

“Siempre he dicho que Santiago de Cuba es mi segunda patria y hacia sus peloteros y entrenadores tengo la mayor admiración. A mis atletas, principalmente a los más jóvenes, les llamo chamaquitos, niños, etc. A Santiaguito Torres, por ejemplo, le digo «mi segundita» y nunca se ha puesto bravo porque sabe que lo hago por cariño. Portuondo, más allá de la falta de paciencia de nuestros bateadores, tiene el gran mérito de haber frenado a nuestra tanda en su mejor momento y salió así de su mal comienzo individual”.

Y siguió justificándose y enredándose en la pata no de los caballos, sino de sus mismos Toros, cuando asume que los calificativos despectivos que incluso, pudieran hasta sonar homofóbicos, no son una falta de respeto.

“Desde que estoy en la pelota, cuando vemos a un jovencito así, decimos: ‘mira qué bien el pitchercito ese’, o ‘qué buen brazo tiene ese tercerita’, no tiene nada que ver con falta de respeto”.

Pero, lo que pasa con Borroto es eso: que es falta de respeto nato y que no entiende que el del problema es él, que descalifica a los demás; que no son los demás “contra él”, sino él que está muy mal educado.

De hecho lo reconoce cuando señala: “El año pasado sucedió algo similar con Yanmichel Pérez y a él le quedó claro que no traté de ofenderlo ni minimizarlo, es lamentable que vuelvan a malinterpretar mis palabras, porque siempre trato de ser respetuoso”.

Si te sucedió el año pasado, ¿por qué insistes en lo mismo?

⚠️⚠️⚠️ A raíz de la repercusión de las declaraciones de Miguel Borroto en la conferencia de prensa de la subserie entre…

Posted by Toros de Camagüey on Monday, October 5, 2020

Lo triste es que este hombre no vislumbre que no solo la parte descalificativa está en el sufijo “ito” (pitchercito) sino que al él decir luego de Portuondo, “lo hicimos pitcher”, lo está volviendo a descalificar.

Sin dudas Borroto necesita modales e instrucción, pero al parecer él no tiene tiempo y en verdad parece un poco anciano para entender de estas cosas.

Si sigue con sus “segunditas” y “terceritas” un día de estos le van a dar un “batacito” por la “cabecita” y le van a hacer una “heridota” -que Dios no quiera ninguna de estas dos cosas- porque se va a tropezar con un “atravesadito” que no va a entender del modo que él quiere y cree que dice, su “lengüita“.

por Roberto A.



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