Jubilada cubana recibe 120 de los 340 pesos que le prometieron

Una jubilada cubana se queja de que su pensión, que sería de 340 pesos mensuales se la redujeron a 120 pesos, con los que no vive nadie en Cuba.

Una jubilada cubana escribió al diario oficialista cubano Juventud Rebelde, con la intención de captar el buen espíritu de Pepe Alejandro, gestor de la columna de quejas Acuse de Recibo, a ver si este publicaba su misiva y la mujer encontraba solución a su problema. Este, de por sí, resulta doloroso.

Tras anunciar su retiro y presentar la jubilación, a esta mujer le dijeron que recibiría 340 pesos mensuales . Sin embargo, cuenta la jubilada cubana, lo que le “asignaron” fue apenas 120 pesos.

Pepe Alejandro publicaba ayer un texto titulado “Traumática jubilación”. En este, la jubilada cubana, que responde al nombre de Sandra Navarro Valdés,  narra con lujo de detalles lo sucedido.

La afectada cuenta en su misiva que es artesana y miembro de la Asociación Cubana de Artesanos Artistas (ACAA), inscrita en el Registro del Creador para las Artes Plásticas y Visuales.

Residente en  la calle Pobre No. 254, entre Academia y Tuinicú, en la la ciudad de Camagüey, la mujer parece ser que hará o hace honor al nombre de la calle donde vive; y no es para menos. De 340 pesos que “le tocaban”, se lo han dejado en algo menos de la mitad.

Dice encontrarse insatisfecha con su proceso de jubilación, y con sobradas razones. ¿Qué jubilada cubana puede sobrevivir con apenas 120 pesos al mes?

Trabajó durante 33 años, y si luego de 33 años de trabajo, a cualquier jubilado cubano le dan solamente 120 pesos moneda nacional, es para cometer una locura. Con 120 pesos moneda nacional, en Cuba, no vive decentemente nadie. Ni decente ni malamente. 120 pesos moneda nacional no alcanzan para nada.

Su expediente, y con él el dinero de esta jubilada cubana llegó con retraso. Además llegó “corto”. Demasiado corto para quien toda su vida se desempeñó laboralmente.

La mujer añade que ya esto sucedió con otros dos ex-compañeros de trabajo y dice que el entuerto aún no ha tenido solución.

Molesta, se presentó en la Dirección Provincial del Inass en Camagüey, donde entregó un recurso que será revisado en el transcurso de 3 meses luego de ser recibido en La Habana.

Argumenta la mujer que esta jubilación “no está ni cercana a la pensión mínima aprobada para cualquier trabajador en el país”, y se pregunta con mucho miedo: “¿Cuál es la protección que tendré en el futuro dado los cambios que se avecinan en el país?”

“Reclamo lo que considero que me pertenece y avala mi expediente y tiempo de trabajo. He vivido honradamente de mi talento y por ello he sido en muchas ocasiones reconocida. ¿De qué me vale ahora? Fríamente me entregaron esa cifra y se supone que es la última palabra. En estos momentos somos tres artesanos en la Asociación en la misma situación con diferentes condiciones, y sin embargo el cálculo es el mismo valor de 120 pesos”, concluye la jubilada cubana su carta.

Sandro Nieto

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