Informantes que ayudaron a resolver un crimen no recibirán su recompensa

De que Estados Unidos es un país de leyes lo es, pero de que también la justicia norteamericana está plagada de tecnicismos también lo está.

De ello pueden dar fe dos informantes, que de acuerdo con un reportaje dado a conocer en un programa de televisión, no “calificaron” para recibir la recompensa que ofrecían las autoridades por su inestimable ayuda en el esclarecimiento de un crimen.

WSVN lo explica así:

Los hombres llamaron al número de teléfono de Crime Stoppers para darles a la policía la ubicación exacta del automóvil que atropelló y dio muerte a Hilda García, una anciana de 76 años de edad que en junio pasado fue golpeada y atropellada por un automóvil en la calle.

El chofer del vehículo se dio a la fuga. No había cámaras en el lugar del hecho y todo lo que sabía la policía es que el auto, por la forma, era un vehículo presumiblemente fabricado entre el año 2005 y 2009. Nada más.

Pero dos informantes llamaron anónimamente al número en pantalla. Cuando llamaron, dijeron que sabían donde estaba el vehículo que la policía se encontraba buscando, y pidieron que sus identidades se mantuvieran anónimas.

Un día después al ver que aún no habían arrestado a nadie, volvieron a llamar, pero esta vez lo hicieron directamente a la policía; minutos después se entrevistaron con unos detectives. Horas más tarde fue arrestado Ricardo González, quien se entregó personalmente en la policía luego de enterarse que estaba siendo buscado. Los informantes, mientras, comenzaron a esperar que llegara su recompensa. Pero esta nunca vino.

De acuerdo con el reportaje, ellos “habrían cometido un error”: al llamar a la policía directamente, sus nombres dejaron de ser anónimos. De hecho, ambos aparecían en el reporte elaborado por la policía.

“Ustedes no califican para la recompensa porque su nombre está en todo el informe policial“, les dijeron.

Suzette Rice, presidenta de Miami-Dade Crime Stoppers lo resume de esta manera: “Si no eres anónimo, no puedes calificar para una recompensa de Crime Stoppers.”

“Dar a conocer nuestro mensaje, que debe ser anónimo y que queremos pagar la recompensa, es muy importante”, dijo la funcionaria, y argumentó que “si alguien no es anónimo se convierte en testigo, y “recompensar” a un testigo puede causar problemas al presentar el caso en el tribunal, ya que puede parecer que les pagaron por su testimonio.”

A pesar de haberse quedado sin el dinero ofrecido, los informantes dijeron que están contentos porque el criminal se encuentre tras la rejas.

Pero una pregunta flota en el aire: ¿y si el asesino hubiese escapado luego de esas primeras horas en que Crime Stoppers no hizo nada?