Haters oficialistas revolucionarios vs Luis Alberto García y Haydée Milanés

Los haters oficialistas revolucionarios han ido “al ataque” contra Luis Alberto García y Haydée Milanes. ¿El motivo? Opinar diferente a ellos.

Los modos que han encontrado van, desde la ofensa más baja hasta los ataques sexistas.

Muy mal, loma arriba o loma abajo y sin freno (da igual) muy mal andan las cosas y causas de los defensores en las redes del oficialismo cubano cuando a la hora de enfrentar una opinión respetuosa, inteligente, responsable y dicha desde el dolor, atacan a quienes la expresan con ofensas de todo tipo. Estamos hablando de los “haters oficialistas revolucionarios”.

Para muestra no uno, si no dos botones: lo sucedido con Luis Alberto García y Haydée Milanés en días pasados. Empiezo con la segunda.

La cantante cubana Haydée Milanés concedió una entrevista al medio El Estornudo en la cual habló no solo de sus orígenes musicales, de la influencia en ella, musical, de su padre Pablo Milanés, sino también de la Cuba actual en la cual ella vive. De su gente.

Dijo cosas muy dolorosas, pero sinceras, como que las personas tenían miedo de expresarse; que no estaba segura de querer “esa Cuba” – la real, la que se ve en la calle, no la de los Noticieros y el Granma, Cubadebate, Juventudd Rebelde, ad infinitum… – para el futuro de su hija y de ella misma.

El post de la entrevista, publicado en la página de Facebook de El Estornudo desató la furia entre una decena de Haters oficialistas revolucionarios al parecer puestos en contubernio no podría precisar si contra El Estornudo o contra las opiniones diferentes, y lo expresado ha dejado un mal sabor a quienes tuvieron que leer cosas como:

• es la hijita de Papá
• sin su papá ella no es nadie.
• que se vaya, aquí no la queremos
• que se vaya, aquí no la vamos a extrañar
• aqui nadie la conoce.
• aquí es la hija de Pablo, allá afuera va a ser una infeliz cantante

Y otras ofensas parecidas. Lo más triste del caso es que varias de ellas fueron dichas por mujeres. Mujeres revolucionarias, defendiendo supuestamente “la Revolución”, con argumentos peyorativos y de odio. Propio de los haters oficialistas revolucionarios.

Sin embargo, lamentablemente – y sin ánimos de establecer competencia – el premio gordo se lo llevó Luis Alberto García. Y este, es un caso aparte.

Resulta llamativo que un perfil a todas luces falso – sin foto real – escriba un post en Facebook y en tan corto tiempo logre tener tantas reacciones, simultáneas casi todas y con igual “creencia política”. Sin dudas se trata de un ataque planeado entre un “oficial” y el ejército de haters oficialistas revolucionarios, que evidentemente fueron avisados de la salida del post y exhortados a comentar debajo. Solo así se explica que en tan corto tiempo tantos comentarios similares apoyen el criterio de un perfil falso de Facebook en contra de lo dicho por Luis Alberto con relación a lo sucedido en Cuatro Caminos. 

626 reacciones, 509 comentarios y 451 shares ha logrado este post de un tal Vladimir Oscar que apenas tiene 300 amigos en Facebook, casi sin información personal y ni siquiera 10 fotos reales en Facebook.

Pues ahí, fueron casi al unísono (ojo con este detalle que es fundamental), cientos de “ofendidos” a expresar sus más sagradas creencias y odios contra Luis Alberto. Entre las frases que, de manera lastimosa pueden leerse están:

• • es actor gracias a la Revolución
  • este mulato debe darle gracias a la Revolución
  • sin la Revolución no fuera nadie.
  • traidor
  • pendejo

Y mi preferida: “este hombre traicionó los valores que defendió en la serie Algo más que soñar”. ¿Acaso este hater nunca se enteró que Algo más que soñar era una serie de ficción? ¿Que Luis Alberto estaba actuando?

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Muy mal, pero muy mal andan los haters oficialistas revolucionarios si para defender “la obra” revolucionaria acuden con argumentos de odio y tan infantiles a atacar a quienes valientemente expresan su deseo de una Cuba mejor; porque la verdad que son miles – somos miles – los que queremos una Cuba mejor; y si dar ideas, aportar iniciativas, denunciar todo lo mal hecho, y “cambiar todo lo que debe ser cambiado” pasa por el filtro de quién lo dijo o guiarnos por el comentario interpretativo de alguien que NO EXISTE, pues muy mal que vamos. No vamos por el camino correcto.

Es más: ni nos estamos moviendo. O quizás sí: hacia atrás. Como el cangrejo.

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por Roberto A.