Animales
Proyecto del fotógrafo Gabriel Bianchini por ley de protección animal en Cuba
Por Manuel Camejo
Tal vez ahora puedan vernos es el nuevo proyecto del fotógrafo Gabriel Bianchini, que se suma a la campaña para impulsar una ley de protección animal en Cuba
Gabriel Bianchini es uno de los jóvenes fotógrafos de mayor reconocimiento en Cuba. El artista ha mostrado su sensibilidad creativa en diversos proyectos expuestos en la isla y en otros países, que han obtenido una respuesta muy favorable tanto del público como de la crítica.
El pasado mes de diciembre inauguró una muestra con diez gigantografías en la Catedral de La Habana, en el Centro Histórico, que se convirtió en un acontecimiento cultural en la capital cubana.
Ahora ha decidido sumarse a la campaña para impulsar una ley de protección animal en Cuba con una serie de fotografías que ha nombrado “Maybe they can see us now” (Tal vez ahora puedan vernos).
El título de la muestra se relaciona directamente con el abandono a que se encuentran muchos animales en la isla debido a la ausencia de una legislación que los proteja del abuso y el maltrato.
En la serie se pueden ver perros y gatos a gran tamaño en diversos puntos de la ciudad como el Malecón, el Capitolio, el Arco de Belén y la Plaza de San Francisco de Asís.
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Tras el proceso de edición, los animales parecen gigantes que sobresalen por encima de la ciudad y forman parte de su dinámica habitual.
A propósito de la muestra, Bianchini accedió a dialogar con Cubacomenta en una entrevista realizada por correo electrónico.
¿Cómo nació la idea de este proyecto?
La idea nació por la necesidad de una ley de protección animal en la isla. Los animalitos callejeros llevados a un tamaño colosal hacen que en el imaginario sean totalmente visibles y no puedan seguir pasando desapercibidos.
¿De qué manera han sido acogidas estas fotografías entre el público y los conocedores de su obra?
La acogida ha sido una sorpresa y no. Sorpresa porque la serie la empecé como un modo de experimento sin esperar mucha reacción. A la vez no ha sido una sorpresa el eco que ha tenido pues es cierto que somos miles los que estamos deseando esa ley. Al tocar un tema tan necesario salen a relucir cuántas personas están involucradas de corazón y son sensibles al bienestar de estos seres.
¿Los cubanos cómo cree que puedan aportar a la aprobación de una ley de protección a los animales?
Partiendo de una ley se está creando una base para la siguiente tarea que es la que más tiempo llevará, crear conciencia. Aprendí a amar y respetar a los animales por mi mamá. Por lo que la apuesta está en sensibilizar a las familias, luego de generación a generación seguirá evolucionando algo que se volverá costumbre.
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¿Inaugurará una muestra con esta temática en alguna galería habanera?
Pienso que más adelante si haré una muestra de estas fotos en alguna galería de La Habana; por lo pronto seguiré desarrollando el proyecto para que gane en consistencia.
¿Le gustaría que esta idea llegue a otros países donde tampoco existen leyes para la protección a los animales?
Por supuesto que Cuba no es el único país con esta situación. Son muchos. Trabajando por una causa justa para un futuro más armonioso en un trocito de tierra del Caribe, puede llegar a replicarse en otros sitios del mundo. Prueba de ello es que una organización francesa me contactó por esta campaña.
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¿Por qué piensa que en Cuba no se ha aprobado una legislación a favor de la defensa de los animales?
Pienso que el principal impedimento ha sido la falta de interés, y la poca sensibilidad. Nunca es tarea fácil redactar una ley y aplicarla con efectividad. Pero es responsabilidad del gobierno marcar la pauta para construir una sociedad más comprometida con la naturaleza, que al fin y al cabo, es nuestra verdadera madre.
¿En qué otros proyectos trabaja actualmente?
Mis proyectos son un abanico de colores, no me defino en un campo en específico y hago todo cuanto sueño. En estos momentos estoy desarrollando ideas pendientes, terminando mi galería, experimentando con la impresión en hojas de árboles y más…
¿Cuál es su máxima aspiración como artista y fotógrafo?
Mi mayor meta como creador, como artista, es bien sencilla y siempre ha sido la misma, no quedarme con nada adentro. La paz no la trae el éxito, eso es circunstancial y agradecido, a veces. Pero nada me trae más tranquilidad que respetar todas las ideas que me vienen y trabajar duro para verlas nacer. Llegar a viejito sintiendo que hice cuanto soñé, ahí está la felicidad.
