Exagente del G-2 cubano en Miami podría enfrentar 20 años de cárcel

Un exagente del G-2 cubano que fue captado haciendo compras en Miami, pudiera enfrentar hasta 20 años de cárcel de ser hallado culpable – entre otros cargos – de mentirle a las autoridades migratorias norteamericanas al momento de su entrada al país.

La vida en Miami para el exagente de la Seguridad del Estado cubano Saúl Santos Ferro, se le complicó y de qué manera cuando alguien lo vio saliendo de un supermercado y, a pesar de los años y las canas –  Santos Ferro tiene ya 74 años de edad -, lo reconoció, le tiró una foto y la publicó en Facebook.

Desde ese momento su imagen e historia comenzaron a circular por las redes sociales con un contundente mensaje debajo de la fotografía: que ese hombre, aunque con muchos años de más encima, había sido un agente de los órganos de la Seguridad del Estado cubanos; y que se encontraba residiendo nada más y nada menos que en la llamada cuna del exilio histórico. Varias personas se hicieron eco de la publicación y denunciaron que, además, Santos Ferro se desempeñó en la dirección de establecimientos penitenciarios en la provincia de Pinar del Río.

¿Cómo llegó a Miami el agente Santos Ferro, si al entrar a este país en el formulario que te hace Migración se te pregunta bien claro si perteneces o has pertenecido a organizaciones vinculadas a ministerios represivos? Mintiendo.

Por eso tal vez el anciano se declaró culpable ante la corte federal del Downtown de Miami en las últimas horas, y admitió que fue militar en la isla. Santos Ferro aclaró además que cuando viajó a los Estados Unidos estaba retirado y trabajaba por su cuenta, como si esa confesión hiciera alguna diferencia. La pregunta que te hacen los agentes migratorios en la frontera es bien precisa: perteneces o alguna vez has pertenecido.

También te lo preguntan al momento de llenar el formulario para la solicitud de la residencia permanente en el país. Y cuando a Sánchez Ferro le preguntaron eso dijo que no. Y mintió. Al parecer dos veces.

Sánchez Ferro, quien fuera jefe de la Seguridad del Estado en San Cristóbal, antigua provincia de Pinar del Río (actual Artemisa)  enfrenta cargos por fraude al seguro social. El exagente del G-2 cubano recibió además dinero del gobierno norteamericano entre el 2016 y el 2019, cuando no debió haber recibido un centavo.

Tal vez por ello la jueza que lleva su caso fue tan clara y directa. No olvidemos que estamos en Miami y, a pesar de que la justicia suele ser imparcial, siempre el criterio personal suele imponerle cierta pasión a una sentencia cuando hay un margen para aplicarla que va del llamado “mínimo al máximo”.

Sin embargo, esta le aclaró que no sería ella quien tomaría la decisión final del caso, sino un juez del distrito. Eso sí, y para que no se hiciera falsas ilusiones, le explicó con lujo de detalles que posiblemente le esperen hasta 20 años de cárcel; y que además no tendrá derecho a apelación.

Sánchez Ferro desde su detención se encontraba en arresto domiciliario. Tenía puesto en su tobillo un dispositivo de localización por GPS; y además debió pagar por su fianza la suma de 100 mil dólares.

Los documentos del caso de Santos Ferro pueden ser consultados y descargados aquí