Una cubana denunció en Facebook un nuevo caso de problemas en la atención de salud en Cuba, que habría sucedido en el policlínico de Boyeros.

Zaily Cabrera cuenta que su tía sufrió serias quemaduras cuando le explotó la cafetera este sábado y que no fue atendida en cuando acudieron a dicho policlínico.

“Esto es a lo que se le llama potencia médica aquí en Cuba. Mi tía se quemó y fue al policlínico de Boyeros a que la atendieran y caminando porque no hay transporte y cómo mismo fue tuvo que virar porque no hay médico que la pudiera atender”, escribió en su cuenta de la red social junto a dos fotos que muestran las quemaduras en el rostro y el pecho.

“Sabemos que tenemos problemas por lo de la pandemia del coronavirus, pero señores, hay que priorizar también al paciente que llegue con otro problema que no sea coronavirus. Si es algo grave se muere el paciente. Parece mentira que hay médicos para mandar para otros países y para nuestro pueblo, en los policlínicos, no haya un médico para atender. Después llamamos a esto potencia médica”, afirmó Zaily.

Ante la falta de atención en el policlínico de Boyeros, su tía fue curada en el hospital Calixto García, en donde le trataron las quemaduras de segundo grado que sufrió.

En los comentarios, varios usuarios se quejaron de otras deficiencias, como Anisley Gil, quien manifestó que “llevo rato con dolor de oído y ayer me mandaron para el Calixto García porque ahí no hay recursos para eso. Y yo me pregunto en qué coj… me voy para el Calixto si no hay guaguas y alquilar un carro en estos momentos me puede costar 20cuc o más…”.

Durante la pandemia han crecido las molestias en la Isla con respecto a las deficiencias en la atención médica. Días atrás, una mujer narró como una anciana tuvo que aguardar unas 15 horas por la llegada de una ambulancia que la trasladara a un hospital para una tomografía, pese a que habría sufrido un infarto cerebral.

Elizabeth Valdés compartió un video en su cuenta de Facebook en el cual se muestra molesta y describe la espera a la cual fue sometida su abuela de 92 años el pasado jueves, tras haber sufrido lo que se presumía fuera un infarto cerebral.

Julio Linares

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