Connect with us

Published

on

La Policía de Ciego de Ávila decomisó a un cubano cientos de productos industriales “de dudosa procedencia” en lo que por ahora es el último de los “grandes hechos” protagonizado por la policía de un país donde los robos -o “la lucha”, como le dicen los cubanos- está en todos lados y a toda hora.

También “los vigilantes”.

Sí, porque la policía de toda Cuba generalmente no es hábil en encontrar estos “presuntos delitos”. Más bien llegan a los lugares alertados por un vecino, una ex o un ex que se decidió a “echar para alante” a su ex pareja.

Menos aun llegan porque los eficientes controles administrativos detecten en auditorías los robos y desfalcos. Esos casos son los menos, porque muy pocas -por no decir, casi ninguna- son las empresas cubanas que poseen un sistema de control de activos eficiente que les permita detectar fuga de de productos de fabricación industrial, como en este caso, que al parecer salieron de algún almacén estatal. Sí, porque no hay almacenes privados. Ni grandes ni chiquitos. A no ser los de los productores de tabaco.

En la provincia de Ciego de Ávila son varios los casos de decomisos contra presuntos robos que ha protagonizado la Policía cubana. La mayoría de ellos tras una llamada telefónica. La mayoría de las llamadas telefónicas son, además, anónimas.

Dice el reporte oficialista que el ciudadano cubano residente en Ciego de Ávila al que se le ocupó una considerable cantidad de productos de fabricación industrial “de dudosa procedencia” y se le acusó posteriormente de presunta venta ilícita y acaparamiento, fue primeramente denunciado ante las autoridades.

Fue entonces cuando el cuerpo policial se decidió ir a hacerle “una visita” al sujeto. En casa le encontraron cajas eléctricas de diferentes dimensiones, pelos de segueta, rollos de cinta adhesiva, envases con pegamento y conexiones hidráulicas, entre otras cosas. El hombre ahora deberá demostrar de dónde sacó todo eso, cómo lo adquirió, lo cual parece imposible.

Mientras la fiscalía prepara su legajo de argumentos y acusaciones para presentarlo ante el Tribunal que juzgará al individuo, los productos fueron depositados en los Almacenes Universal S.A. Señalan los agentes del orden que ahora, paralelo a ese proceso, se está investigando a un grupo de personas que pudieran ser responsables colaterales de los supuestos delitos. O sea: los que presuntamente le vendieron o facilitaron el acceso al sujeto a estos productos.

Nada dice el reporte periodístico ni la policía sobre lo que hay más allá del famoso “sofá” del cuento del hombre engañado. Es decir: ¿qué hay de establecer controles rigurosos para evitar estos presuntos robos y desvíos?

La actuación policial contra un presunto acaparador y cuatro o cinco almaceneros o proveedores de mercancías será siempre como la anécdota del hombre que por no comprar una tubería nueva fue pagando poco a poco más dinero al plomero para que le fuera cogiendo los múltiples salideros, poco a poco, a la tubería vieja.

por Ariel P

tal vez quieras leer: Diecisiete implicados en robo de arroz en Granma



Comentarios

LO MÁS TRENDING

LO MÁS VISTO