Cinco médicos cubanos deciden no regresar a la isla y piden Asilo Político en Brasil

De acuerdo con información dada a conocer esta mañana a través del diario brasileño O Globo, cinco profesionales de la salud cubanos que se encontraban ejerciendo como doctores en el programa de salud “Más Médicos” en Brasil, decidieron no regresar a la isla y pedir Asilo Político en el gigante sudamericano.

O Globo reseña que los cinco profesionales de la salud cubanos trabajaban en el municipio de Nova Odessa. Otros tres que trabajaban junto a ellos en el mismo lugar regresaron a Cuba este fin de semana.

El diario brasileño señala que la despedida entre ellos fue muy dolorosa, pues todos llevaban trabajando juntos desde hacía ya un año y medio.

“Fue muy difícil’, dijo la doctora cubana Odalis Ricardo Casanova, una de las que regresó a Cuba, mientras que Yayma Godinez Pereira, una de las que se quedó, corroboró a O Globo que más que compañeros de trabajo eran amigos.

Junto a ella tomó la difícil decisión Liseti Aguilera. Ambas ahora han sido calificadas por la isla como “desertoras”.

“Decidí elegir la oportunidad ofrecida por Brasil a los médicos cubanos que decidieron continuar trabajando aquí e intentar continuar trabajando en el Programa Más Médicos y luego hacer la revalidación del diploma’, explicó Aguilera, quien al igual que Yayma Godinez deberá esperar mínimo ocho crueles años hasta poder regresar a la isla a ver a sus familiares.

La difícil situación que se vive en Brasil tras la retirada de los galenos cubanos del Programa de Salud “Más Médicos” ha disparado los encontronazos no solo entre el gobierno de Brasil y su similar de Cuba, sino incluso entre los mismos cubanos.

Se trata de una situación compleja que polariza los sentimientos. Por un lado, están quienes defienden la gratitud que los galenos cubanos deben tener ante el país que los formó como profesionales de la salud; por otro, están quienes consideran que no deben nada por cuanto el gobierno se quedaba con el 70% de sus salarios. Otros, que han trabajado ya durante muchos años en hospitales y policlínicos de la isla creen que ya “la deuda de los estudios” está pagada.

El gobierno califica como “héroes” a quienes regresan, y a quienes se quedan como “desertores”. Quienes se quedan dicen que ellos “no han traicionado a nadie ni a nada”; dicen que muchos que regresan lo hacen porque “tienen la familia en Cuba”, y si tuvieran la oportunidad de tenerla en Brasil con ellos “no regresaban”.

Pero en general, a pesar de las divisiones y los sentimientos hay un denominador común en esta historia: los galenos cubanos cobraban mucho menos de lo que Brasil paga por sus servicios. Todos vivían “solos”, distantes de sus familiares en la isla. Muy pocos habían hecho la revalida de sus estudios como profesionales de la salud, un requisito que en muchos países del mundo se exige como indispensable a la hora de ejercer tal profesión (y otras también). Y una X que pesa como todo un abecedario: quienes decidieron regresar, no podrán viajar de regreso a la isla en ocho años.

Muchos dejarán de ver a sus hijos crecer, otros no podrán darle un último adiós a sus padres.

El conmovedor video de la despedida de estos cubanos de sus amigos puede ser visto en el siguiente enlace.