Futbolistas cubanos “se bajan del avión” en Nueva York

Se trata del más reciente episodio de fuga colectiva de futbolistas cubanos.

Según fuentes extraoficiales, cinco futbolistas del equipo Sub-23 cubano que buscaba la clasificación olímpica abandonaron esta mañana la concentración, durante una escala en Nueva York. Se trata de los cienfuegueros Serguei Campillo, Janciel Blanco y Ansel Armenteros. A ellos se les unió el matancero Yosniel Alberto González y el espirituano Eduard Puga, todos figuras claves en sus respectivos equipos en el Campeonato Nacional.

Otra fuente desde dentro de Cuba, aseguró que “los primeros cuatro sí se quedaron”, pero desmintió que Puga estuviese en el grupo de “desertores”.

La Manada, ese sempiterno seguidor en Twitter de “lo último” con relación al fútbol cubano no se ha manifestado aún.

Se trata del más reciente episodio de fuga colectiva de atletas cubanos. Recientemente duranta la Copa Oro de Fútbol, otros tres futbolistas cubanos aprovecharon un descuido en la férrea vigilancia de la cual son siempre objeto, “y dejaron las maletas en la habitación.”

Así hicieron también en el pasado, desde el año 2008, en adelante, Osvaldo Alonso, Reinier Alcántara, Rey Ángel Martínez , Maykel Galindo, Heviel Cordoves, Maykel Chang, Ariel Martínez, Yenier Bermúdez y Alberto Delgado, por solo mencionar a algunos que decidieron dar vuelta y no mirar más hacia “las cuatro letras” que dejaron detrás.

Hasta cierto punto es comprensible la fuga. Si existe un deporte que se practica en Cuba bajo condiciones realmente deprimentes, es el fútbol. A la alimentación en ocasiones deficiente en calorías, se suma el hecho indiscutible que representa el enorme gasto energético al que están sometidos los futbolistas cubanos, entrenando y jugando. Lo hacen a pleno Sol, y son varios los terrenos en el país donde, los banquillos, ni siquiera están techados.

Apenas hace unos meses los futbolistas cubanos más talentosos comenzaron a probarse en ligas fuera del territorio nacional; República Dominicana fundamentalmente.

Especialistas en el tema, como Mario Lara y Daguito Valdés, han reconocido en el pasado, en conversaciones con este redactor, que se trata de un deporte “sin futuro en la isla”; en gran medida por la poca empatía hacia los males que sufren los futbolistas cubanos por parte de la dirigencia del fútbol en la isla. Son sonoros los casos de denuncia hacia actitudes déspotas por parte de dirigentes del fútbol como Luis Hernández, Presidente de la AFC.

A esta hora se anuncia como “escándalo” que se hayan quedado cinco. Cinco o cuatro, da igual; la realidad es que pudieron ser muchos más.

Roberto A.