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Cuba

La algarabía del basurero: otra consecuencia de la “coyuntura”

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Texto y fotos: Lucía Jerez

En La Habana, los basureros están desbordados, incluso en zonas que antes destacaban por su pulcritud. Según algunos, parece ser otra consecuencia de la “crisis coyuntural”

Por estos días, bajo la efervescencia de la “crisis coyuntural” que vive Cuba, en las calles no solo alarma la aglomeración de personas esperando un transporte. La basura también pulula por todos los rincones.

Si bien esto constituye un problema que caracterizaba a áreas específicas, por ejemplo, de la capital, ahora es una cuestión general y es posible hallar basureros desbordados en las zonas que antes destacaban por su pulcritud.

La calle San Pedro esquina a Hidalgo, del municipio Plaza de La Revolución, es uno de esos espacios donde los desechos han encontrado un terreno seguro, aun cuando está a solo unas cuadras del Consejo de Estado y relativamente cerca de ministerios como el de la Agricultura y el Transporte.

Este lugar, próximo a la avenida Boyeros, se reconoce por la presencia de edificios multifamiliares, todos con más de 10 pisos, a los que rodea un círculo infantil, un punto de ETECSA y un mercado en divisas, lo cual justifica el constante movimiento de personas por allí.

“Yo nunca había visto esto así. Antes uno se desesperaba porque un día no recogían la basura, ya hoy hace casi cinco que ninguno de esos camiones pasa por aquí. El mal olor es desesperante, eso sin hablar de la cantidad de enfermedades que puede traer”, declaró Rosa García, vecina y presidenta del CDR de uno de los edificios.

El dengue y los basureros

Aunque una vez más se escapa de las líneas de la prensa estatal, el número de personas con dengue en el país llega a ser preocupante, sobre todo en algunos territorios donde la epidemia se ha propagado con facilidad. Las autoridades sanitarias de la isla han explicado que el momento del año que comprende desde finales de septiembre a principios de noviembre es el más peligroso para la infestación del mosquito Aedes Aegypti, responsable de la transmisión de esta enfermedad y de otras como zika, chikunguya y fiebre amarilla.

Hace veinticuatro horas que el  sitio digital Cubadebate publicó las declaraciones de la Dra. Carilda Peña García, directora nacional de Vigilancia y Lucha Antivectorial del Ministerio de Salud, quien explicó que los focos del insecto se encuentran fundamentalmente en las provincias cabeceras, porque es donde hay mayor concentración demográfica, mayor cantidad de depósitos de agua y mayor generación de desechos.

Carencia de combustible, comunales y camiones de la basura

Este tema también le ha quitado el sueño a Julio Ortiz, habitante de Nuevo Vedado, a quien le preocupa el contacto de los más pequeños con ese nivel de contaminación. “Todas las tardes, alrededor de las cinco y pico, esta calle se vuelve un terreno de fútbol, porque los muchachos vienen a jugar. A mí me asusta porque hay muchas moscas, sabemos que eso propaga enfermedades, y la fetidez es permanente.”

“Mira, aquello que tú ves ahí es un círculo infantil, aquí hay muchos insectos que transportan las bacterias de un lado a otro y los niños son esponjitas que además todo se lo llevan a la boca; pero si te fijas, allí en la esquina se sienta un señor a vender pastelitos de guayaba y cremitas, productos que están expuestos a esas inmundicias”, sostiene una madre que buscaba a su hijo en la guardería.

La carencia de combustible parece ser la principal razón por la que la ciudad capitalina roza las posibilidades de convertirse en un gran vertedero. Esta vez va más allá del mal trabajo por el que son señalados los los trabajadores de comunales, tampoco es problema de ausencia de vehículos de basura, como sucedió en una ocasión. Desde el pasado abril Japón donó al país veinticuatro camiones para realizar la operación, que comenzaron utilizándose precisamente en los municipios de Centro Habana, Habana Vieja y Plaza de la Revolución.

El gobierno de la isla ha decidido priorizar la reserva de diesel en otro tipo de cuestiones, los transportes de recogida de desechos no tienen petróleo para hacer sus recorridos habituales y cada vez pasan con menos frecuencia por los sitios necesitados.

Sin dudas convendría a todos que la crisis sea tan breve y coyuntural como dijo Miguel Díaz-Canel; además de las afectaciones que está sufriendo la población, se verían perturbadas todas las obras en vísperas al próximo noviembre, cuando se cumplen cinco siglos de la fundación de la ciudad que en el año 2016 se incluyó en la lista de las siete urbes maravillas del mundo moderno.

 


 

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