Baja la edad en que se puede padecer una disfunción eréctil

“Cinco de cada diez hombres mayores de 50 años padecen disfunción eréctil, aunque en los últimos años la edad en la que se presenta este problema ha bajado más”, dijo en entrevista con la agencia EFE el doctor Juan Carlos Acosta.

El 30 de octubre se ha señalado como el Día Internacional de la lucha contra la disfunción eréctil, y el reconocido médico, cirujano y sexólogo reconoce a EFE: “Ahora ya no es el hombre añoso que se encuentra en la andropausia, sino que hay pacientes jóvenes que presentan disfunción eréctil; mi paciente más joven tienen 17 años”.

La disfunción eréctil es la incapacidad del hombre para lograr una erección que permita la penetración. Acosta precisa que se origina en componentes fisiológicos, psicológicos y sociales, pero un alto porcentaje lo ocupan las causas orgánicas, exactamente el 37%. Y aquí se encuentran enfermedades como la diabetes.

“Cuando son hombres jóvenes la disfunción eréctil puede asociarse a la diabetes, la hipertensión arterial, alguna alteración hormonal o niveles altos de colesterol y triglicéridos. El estrés es también la causa principal que disminuye la producción por el organismo de testosterona”, precisó el doctor Juan Carlos Acosta.

El especialista ahondó también en que la cultura machista preponderante en muchas zonas de América Latina provoca que los trastornos de disfunción eréctil se oculten y no sean tratados. “Sin embargo, queremos que el hombre haga conciencia y que sepa que la disfunción eréctil es como cualquier otra patología, quitando este estigma y prejuicio, porque el paciente que la padece se siente poco viril y con una autoestima muy baja”, admitió el médico, cirujano y sexólogo en su entrevista con la agencia EFE.

Juan Carlos Acosta insistió en la necesidad de que la disfunción eréctil sea tratada mediante un manejo multidisciplinario: “queremos que el paciente se sienta atendido en todas las esferas de su vida, ya sea emocional, física, fisiológica”. Y agregó la importancia de que el paciente duerma mejor, disminuya el consumo de alcohol y cigarros, mejore su alimentación, haga ejercicio e intente disminuir el estrés.