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Obras de cimentación y reforzamiento para evitar socavones, se ejecutan en el Malecón habanero. Podrían demorar hasta siete años.

Un tramo del Malecón habanero, ese pedazo de la ciudad que forma parte de la vida misma de los residentes en la capital del país, se encuentra en reparación, y el peligro es más grave de lo que muchos pudieran intuir.

Se trata de una reparación capital en el tramo entre las calles Gervasio y Lealtad, en Centro Habana, debido a peligrosos socavones de tierra, por debajo de la vía, que habían provocado el hundimiento de la acera y el agrietamiento de la cimentación del muro.

“Esto puede traer consigo el colapso del vial y de la estructura de la acera. El agrietamiento del paseo y además un mal funcionamiento de todo el sistema en su conjunto”, declaró al Noticiero Nacional de Televisión una especialista de la Empresa de Servicios Ingenieros Hidráulicos Occidente.

La complejidad de la obra, está más que clara: durará 7 años, y se hará por zonas, según la más reciente previsión del gobierno.

La inversión en estos momentos corre a cargo de la mencionada empresa que, tan solo este año, destinó más de un millón de pesos para arreglar el tramo entre las citadas calles.

El origen del problema está dado en unas “filtraciones” detectadas desde hace ya varios años por la Oficina del Historiador de la Ciudad.

Se necesita abrir y recalzar el muro. Para ello se usarán hormigón y otros materiales, y luego sellar la estructura que, quedaría reforzada, evitando así que el mar continuase penetrando y socavando los cimientos de la estructura.

La buena noticia es que las obras en el citado tramo se encuentran al 75% de ejecución y deben concluir para octubre porque es a partir del décimo mes del año cuando comienzan las fuertes marejadas asociadas al período invernal, y estas imposibilitarían hacer los trabajos de reparación correspondientes.

Lo cierto es que el muro del Malecón, lugar preferido por millones de habaneros a lo largo de su historia para el disfrute y el sano esparcimiento, ha estado en los últimos años bajo la mirilla gubernamental, debido a un informe que asegura que las afectaciones en la zona son cada vez más serias debido a las cada vez más frecuentes y poderosas penetraciones del mar.

Reza el vox populi que el mar siempre recupera lo que le corresponde, y ese pedazo de mar robado hace ya cientos de años tiende a ser cada vez más vulnerable a la elevación del nivel de las aguas en todo el planeta.

Es por ello que se estudió elevar el muro del Malecón un metro más por encima del nivel actual, además de reforzarlo, pero no está claro si esta medida, que finalmente no fue ejecutada, pudiera contener definitivamente la furia de las aguas. Por lo pronto, encontró rechazo en miles y miles de habaneros.

Por lo pronto, se reparan sus cimientos en tramos ya identificados, aunque los enamorados, bohemios y trasnochadores de siempre que gustan de ir a tomarse su “petaca” o su “planchao” al Malecón, aquellos que van a tocar guitarra, y los que lo usan como lugar para ganarse la vida, no pueden hacerlo entre Gervasio y Lealtad.

por Roberto A.

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