Se disparan ventas del “Netflix cubano”

La televisión de la isla aburre y  los negocios privados aprovechan: el “Netflix cubano” es la mejor opción para la cuarentena

Los canales de la televisión cubana transmiten diariamente espacios con el mensaje de “quédate en casa” pero no lo acompañan de una propuesta que logre que los espectadores permanezcan en sus hogares sin caer en el aburrimiento. De ahí que en las últimas semanas se han incrementado las ventas de los comercios privados que ofertan películas o series junto al llamado paquete semanal, ese “Netflix cubano” que le hace la vida mas entremetida a miles de habitantes de la isla.

Francisco, quien prefiere que lo llamemos así, es un hombre de unos 70 años jubilado del sistema de educación de la isla. Él mantiene un negocio de venta de discos en el municipio habanero del Cerro desde hace casi 6 años. Maneja este emprendimiento junto a su hijo, un estudiante de Epidemiología que por estos días integra los grupos que hacen pesquisas en La Habana.

Es conocido en el barrio por tener siempre actualizado su archivo de películas y series. Pero Francisco debido a la propagación del coronavirus en la isla, se vio obligado a poner el cartel de cerrado en la puerta de su pequeño establecimiento. Ha seguido recibiendo clientes, ahora en la tranquilidad de su casa.

Los vecinos, en la puerta de su hogar, le piden determinados títulos y le entregan una memoria o un disco duro. Él revisa en las dos computadores que ha habilitado y enseguida pone a copiar los pedidos. Desde las 9:00 am y hasta las 5:00 pm es un hervidero. La cuarentena le ha exigido tanto trabajo que ha debido auxiliarse de su esposa, Carmita, a quien por la edad (69 años) la enviaron a casa porque está entre los grupos más vulnerables a coronavirus.

“Es increíble la cantidad de personas que vienen a grabar películas y sobre todo series. Habitualmente tengo muchos clientes pero nunca comparado con la cantidad que viene ahora. Me dicen que no pueden con los programas de la televisión, que tienen que ver otras cosas porque de lo contrario se vuelven locos. Yo incluso les regalo muchos animados a los niños para que se entretengan y pasen esta época de la mejor forma posible”, cuenta a Cubacomenta .

Francisco apenas puede contar con su hijo para afrontar esta alza de su negocio. El joven, de 22 años, sale temprano de la casa para seguir con las pesquisas. Su rol lo ha ocupado su madre, quien hasta el momento solo había presenciado el negocio desde afuera.

“Diariamente me traen un montón de discos duros o memorias y les grabo a mis clientes lo que me piden”, dice. Él y su esposa tienen un nasobuco cada uno y le exigen a los clientes lo mismo. Además, en la puerta tiene una frazada con cloro. Por lo general, los clientes no entran a su hogar, pero en el caso de que deban hacerlo les echa agua con cloro en las manos (hipoclorito).

No es el único que ha vivido esta época de “vacas gordas” para el negocio de los audiovisuales y el paquete semanal, a través del cual los cubanos pueden ver con solo unos días de diferencia de su estreno las principales series y películas estadounidenses. De ahí que muchos lo llaman el “Netflix cubano”.

En el municipio Plaza de la Revolución vive un joven (quien prefirió mantenerse en el anonimato) que dejó en tercer año los estudios de ingeniería y tras probar suerte en varios negocios se ha dedicado a la venta de audiovisuales. Es de los más populares entre los consumidores de este tipo de productos. Habitualmente vende el paquete semanal desde su casa y otras ofertas televisas. Cuando comenzó la pandemia, explica, pensó en recesar pero ante las continuas llamadas de sus clientes prefirió dejar abierta la puerta de su emprendimiento.

“Yo pensé que la televisión iba a preparar un diseño más entretenido para que las personas pudieran disfrutar mientras permanecen en casa. Pero como no ha sido así, no han tenido más remedio que acudir al paquete semanal y a las series y películas. Ya sabemos que no es fácil estar encerrado en casa pero si a eso le agregas una oferta televisiva aburrida y cansona, este tiempo se convierte en un cóctel explosivo”, asegura.

Entre los audiovisuales que más graban las personas están las series y las últimas películas de Hollywood. También muñequitos para los niños, novelas, películas cubanas y shows y noticias de la televisión de Miami. “Caso cerrado es uno de los programas más solicitados, aunque a mí en lo particular no me gusta”, indica.

Le preguntamos por las ganancias que ha ingresado y nos responde con una sonrisa. “Un poco más de lo habitual, pero nada del otro mundo. Aunque un poco más de dinero siempre viene bien, sobre todo en este tiempo en que se hace difícil conseguir alimentos y a veces hay que comprarlos por la izquierda”.

El joven nos da el teléfono de otros colegas suyos que se dedican a lo mismo: el “Netflix cubano”. Indagamos con tres de ellos sobre el negocio y todos parece se pusieran de acuerdo. “No nos puede ir mejor, no obstante todos queremos que pase los más rápido este virus y que cause en Cuba la menor cantidad de pérdidas humanas posible”.

Texto y fotos: Lucía Paz