Más de dos millones de cubanos colocan su esperanza en la lotería de visas entre 2010 y 2018

Por Flavia Viamontes

Cuba siempre ha formado parte de las naciones elegidas desde la primera edición en 1995 del programa de Visas de Diversidad (DV-2020), que permite vivir y trabajar legalmente en EEUU. Y esta nueva—quizá última— edición  es la posibilidad para los cubanos que desean vivir el “sueño americano” y ya no tienen otra oportunidad.

Según datos gubernamentales recogidos en Proyecto Inventario, entre 2010 y 2018 más de dos millones de cubanos enviaron sus solicitudes y se otorgaron solo alrededor de 2 500 permisos de entradas a Estados Unidos por ese concepto contabilizadas hasta agosto de este año.

El total de los aspirantes incluye a la persona que envía la solicitud y familiares más cercanos: parejas e hijos.

El gobierno de Estados Unidos empezó a recibir el miércoles tres de octubre las solicitudes para las 50 000 visas de residencia permanente a extranjeros de países elegibles que planea entregar a través de un sorteo al azar entre las solicitudes presentadas.

Aunque los cubanos suelen confundirlo con el bombo que favoreció a miles de durante los años 90 e inicios de los 2000, este es un sorteo mundial dirigido muchas naciones menos Brasil, Bangladesh, Canadá, Colombia, China, El Salvador, República Dominicana, Haití, India, Jamaica, México, Nigeria, Pakistán, Perú, Filipinas, Corea del Sur, Reino Unido, excepto Irlanda del Norte y su territorios dependientes y Vietnam.

Es por ello que las regulaciones especifican que el hecho de ser preseleccionado no es sinónimo de que se tenga la visa. El proceso es largo y para los cubanos, en estos momentos, se hará más engorroso aun.

Debido a la reducción drástica del personal de Estados Unidos en la embajada de La Habana, ahora los cubanos deben viajar hacia Guayana para realizar allá los trámites migratorios correspondientes a estos casos o los de  reunificación familiar. Este hecho, incluso, encarece notablemente el proceso.

Esta nueva oportunidad, correspondiente al del año fiscal 2020,  se inició el tres de octubre pasado al mediodía y finaliza el seis de noviembre a la misma hora y tiene lugar en el momento más tenso en cuanto a política migratoria que se ha vivido desde la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca.

fuente: Proyecto Inventario