Blackie fue un perro maltratado, que fue metido dentro de un saco, y abandonado a morir, pero que al menos en esa primera ocasión, en que logró zafarse, demostró que todavía sus días en la Tierra no estaban contados.
Aunque su habilidad como libero en el Osasco Voleibol Club le ha brindado éxitos deportivos, sus incursiones en el emprendimiento y la influencia en línea, en especial en OnlyFans, le han permitido generar un notable ingreso económico y una creciente popularidad en redes sociales.