“La única verdad es que ustedes se deben a su pueblo y no al que vive aquí en los EEUU, a los que oprimen y están matando de hambre en Cuba, pero se me olvida que ustedes no les importa”.
Walfrido Hernández, descrito por su familia como un dedicado padre y abuelo, así como el cuidador de su abuela de 93 años, había desaparecido desde la mañana del miércoles, después de salir de su hogar con el simple propósito de comprar pan.
"Placer de ver la Película 'Plantadas' y no tengo palabras para decir lo que sentí al ver la historia de estas valientes mujeres como aguantaron de todo en las prisiones".
La publicación no se limitó en su sarta de improperios. Fue más allá en su desprecio contra los cubanos humildes que pidieron “corriente y comida” y “libertad” y los acusó de vivir al margen de la ley.
Kiev negó cualquier participación en la masacre mientras la filial afgana del Estado Islámico se atribuyó la agresión contra el local de música Crocus City Hall.