“The World or Nothing”, el documental sobre la pasión por la danza de dos gemelos cubanos
Los gemelos cubanos Rubert y Rubildo Donatién Dinza son los protagonistas del documental The World or Nothing, que se estrenó este fin de semana en el Festival Hot Docs de Toronto.
Los dos hermanos, de 29 años, fueron seguidos durante diez días por la directora, actriz y escritora Ingrid Veninger, a quien la crítica considera como una de las realizadoras “indies” más prestigiosas de Canadá. Tiene en su haber ya seis películas de ficción, pero The World or Nothing es su primer documental.
La primera vez que Ingrid Veninger se encontró con los gemelos cubanos fue en un hotel resort de Holguín el 31 de diciembre de 2015. Los vio bailar pero no habló con ellos. Así lo cuenta en entrevista con la agencia española EFE: “La noche de Nochevieja, los vi sobre el escenario en el hotel. Eran los mejores bailarines. Me impresionaron con su calidad, su carisma, su pasión. Esa fue la primera conexión. Pensé en hablar con ellos al día siguiente día, pero no los vi”.
Dos años después, en diciembre de 2017 la directora canadiense vuelve a la isla, y entonces sí charla con Rubert y Rubildo Donatién Dinza. En el mismo hotel de Holguín consigue saber el paradero de los hermanos en ese momento. “Encontramos un conductor para que nos llevara a La Habana el 31 de diciembre y regresar el 1 de enero. Acordamos reunirnos en la recepción de un hotel. Allí es donde hablamos durante dos horas”, recuerda Ingrid Veninger.
Ella no habla nada de español y solo uno de los gemelos chapurreaba algo en inglés, pero logran entenderse. Veninger queda con ellos en que volverá para hacer el documental en mayo del año siguiente. Rubert y Rubildo admiten ahora que de principio pensaron que la directora se había equivocado de personas, que no tenían el talento suficiente para que alguien quisiera hacer un filme sobre ellos.
The World or Nothing finalmente no se rodó en Cuba, sino en Barcelona (España), porque cuando en 2018 la directora contactó a los hermanos estos se habían ido a vivir a la ciudad catalana. Allí residen ahora intentando hacerse un hueco en el mundillo artístico. “Es la historia de mucha gente en el mundo. Es una historia de seguir tus sueños contra todo y de perseverar con optimismo. Es una historia positiva. Creo que en estos momentos que a veces se siente sin esperanza, estos dos hermanos que trabajan tan duro y son tan apasionados y que afortunadamente se tienen el uno al otro, son un interesante antídoto contra la falta de esperanza”, concluye Ingrid Veninger.
