Cubano que come cactus causa sensación en Santiago de Cuba

Un cubano que come cactus fue grabado en un video que fue compartido en redes sociales posteriormente.

En Facebook comenzó a circular el video de un cubano que come cactus ante la mirada asombrada de quienes lo observan en La Maya, en Santiago de Cuba.

José Batista Falcón, activista de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), compartió el video de poco más de tres minutos en su cuenta, y explica que se trata de un material de la oriental provincia de la isla.

“Este señor se está comiendo un ataja negro, es un cactus. Oigan, con la leche que suelta ese cactus si te cae en los ojos te deja ciego”, afirma en el post.

“¿Cómo te sientes comiéndote eso?”, le preguntan al atrevido, quien responde que “es pal cuerpo. Esto es un don que Dios me dio”, asegura el hombre, que responde afirmativamente cuando le preguntan si está bendecido por el señor.

Entre las risas y burlas de las personas alrededor suyo en plena calle, que al parecer disfrutaban de un momento jugando el dominó, el cubano que come cactus comienza a dar mordidas a la planta.

Entre los gritos de aliento de los presentes, pasa un buen rato devorando el cactus, mientras estos graban y uno dice que “esto está pa’ Facebook, ahí llegó y paró”.

En el video se observa que da unas unas cuantas mordidas al cactus, que incluso enseña bien de cerca, y también abre su boca para mostrar cómo devora los trozos de este inusitado “manjar”.

No es el primero cubano que “se alimenta” de cosas raras, pues el portal OnCuba contaba en 2016 la historia de Disraelis Acosta, un pinareño a quien apodaron el “el comevidrio”.

Este hombre “rompe un coco con su cabeza, lo pela con los dientes, o se come a mordidas una lámpara de luz fría. Disraelis no surgió de la imaginación de un escritor de la Marvel, sino del barrio El Marabú, en el municipio pinareño de San Juan y Martínez, y a diferencia de los personajes de la conocida editorial de cómics estadounidense, es completamente real”, relataba entonces el periodista Ronald Suárez.

En las fotos que este mostraba entonces, aparecía el barrendero devorando pedazos de vidrio y arrancando la dura cáscara del coco con sus dientes.

Julio Linares