El rublo se ha devaluado tanto que hoy cuesta menos que un peso cubano, que hasta ahora era una de las monedas más precarias del mundo. Según las fuentes financieras consultadas, el valor actual de rublo respecto al peso cubano es a 1 por 4.93, o sea 1 peso se cambia hoy por 4.93 rublos, casi 5, producto de las fuertes sanciones económicas que numerosas naciones europeas, Estaos Unidos y Canadá han aplicado a Rusia por la invasión a Ucrania iniciada hace dos semanas.
Dicho de otra manera: un rublo vale lo mismo que una moneda cubana de veinte centavos, la clásica peseta, con la cual actualmente no se puede adquirir nada en los mercados.
Según el índice Big Mac (Big Mac Index) que publica la prestigiosa revista inglesa The Economist, el rublo se convierte así en la moneda más devaluada del planeta en este 2022, con una caída del 70%, seguido por la lira turca, con una devaluación del 67.9% y la rupia indonesia, con un 59.3% de descenso frente al dólar estadounidense. Otros analistas aumentan la caída al 80%.
Según el medio Bloomberg Economics News, el rublo ha alcanzado mínimos históricos, cayendo hace tres días 142.46 por dólar estadounidense. Mientras que en el mercado informal de divisas cubano, que marca los ritmos reales de la moneda en la isla —lejos de la tasa estatal de 24 pesos por 1 dólar—, el dólar se cotiza en un rango de 90.00 y 115.00, y el MLC depositado en las tarjetas electrónicas, se ubica en el espectro de los 94.00 y los 110.00 pesos, según el reporte diario El Toque. Así, el peso cubano vale más que el rublo.
Fruto de las fuertes sanciones económicas contra personas y empresas rusas, así como la retirada de multimillonarias empresas occidentales del territorio ruso, la deuda pública del país liderado por Vladímir Putin se halla al borde del impago, según las agencias de clasificación Moody´s y Fitch Ratings, que ubican a Rusia en “riesgo de impago inminente”.
Mientras, el Banco Central de Rusia busca paliar la situación crítica con la imposición de un “corralito” de emergencia, con validez hasta el 9 de septiembre, que evite la fuga de capitales, fijando un límite máximo de 10.000 dólares para las retiradas en defectivo de los depósitos en moneda extranjera a nombre de ciudadanos rusos. Esta medida se suma a la decisión previa de transferir divisas al exterior y la obligación de las empresas rusas con actividades en el extranjero, de convertir el 80% de sus ingresos en rublos.
