El pueblo cubano exige respuestas, no solo a nivel local, sino también nacional. Mientras las autoridades sigan priorizando el control sobre la acción humanitaria, la desconfianza y el descontento seguirán creciendo. La pregunta es si el régimen está dispuesto a escuchar y actuar antes de que sea demasiado tarde.
Dainilis Lobaina Torrell murió presuntamente asesinada a manos de su pareja, Ridelkis Guilarte Castillo por causas que aún no han sido esclarecidas. La joven al morir deja dos hijos huérfanos de madre. Licea no dijo si los menores son hijos del agresor. Este, según la denuncia, se encuentra prófugo de la justicia.
En la Francia capitalista, un inmigrante arriesga su vida para salvar a un niño y el presidente se reúne con él. En Guantánamo, tres jóvenes salvan decenas de vidas, y Díaz-Canel, ni el PCC se dan por enterados.
imágenes y videos de familias atrapadas en los techos de sus viviendas en San Antonio del Sur y otras localidades de Guantánamo muestran los difíciles momentos vividos mientras esperaban ser rescatadas en medio de las severas inundaciones.
A medida que los esfuerzos de rescate se ven obstaculizados por el clima, Baracoa continúa bajo el acecho de la lluvia, mientras las autoridades y voluntarios luchan por llegar a aquellos que permanecen atrapados en las montañas.
La población afectada se enfrenta a una realidad compleja, en la que la ayuda humanitaria llega con limitaciones y en condiciones que evidencian las carencias estructurales de la isla para gestionar crisis de gran magnitud
La diferencia de trato entre los difusores de rumores y las autoridades refleja, según los testimonios, una falta de justicia y responsabilidad en la respuesta ante el desastre. Los ciudadanos, en redes sociales, han expresado su indignación, ya que mientras los propagadores de “noticias falsas” serán investigados, los encargados de la protección civil, como aquel que dejó solo a los 29 niños en una escuela, en un hecho que el gobernante designado a dedo dijo que investigaría, no enfrentarán ninguna consecuencia.
Miguel Díaz-Canel, en un mensaje a la nación, expresó su preocupación por la situación y reiteró el compromiso del gobierno de "no dejar a nadie atrás". Sin embargo, los familiares de los desaparecidos continúan esperando noticias.
Con más de mil viviendas afectadas, la pérdida de bienes esenciales y el riesgo sanitario que se cierne debido a la falta de agua y alimentos adecuados, el camino hacia la recuperación en Guantánamo dependerá de la eficacia en la distribución de las donaciones y la resiliencia de sus habitantes para reconstruir lo perdido.