Un post en redes sociales reavivó este jueves las especulaciones sobre una posible movilización de reservistas en Cuba. El periodista Mario Vallejo publicó la imagen de una “citación” supuestamente emitida por el Comité Militar de las FAR para un joven que cumplió el Servicio Militar Obligatorio hace seis años.
“Hoy me llevaron una citación de la reserva militar… ahora, casualmente, lo hacen cuando hay problemas en Venezuela”, se lee en el testimonio difundido por Vallejo.
La publicación desató una oleada de reacciones: desde llamados a que “nadie vaya” hasta recuerdos de los costos humanos de las campañas militares del pasado, especialmente Angola y Etiopía.
Varias madres advirtieron que no permitirán que sus hijos “sean carne de cañón”, mientras otros usuarios pidieron que, de haber despliegues, “vayan los hijos de los dirigentes”. No faltaron voces que, con escepticismo, recordaron que en Cuba los reservistas son citados periódicamente para “ejercicios” o trámites administrativos, por lo que cualquier inferencia sobre un envío inminente a otro país sería, por ahora, conjetura.
Hasta el momento, no hay confirmación oficial de una movilización extraordinaria ni del propósito de las citaciones. En el pasado reciente, las Fuerzas Armadas Revolucionarias han realizado controles de reserva y maniobras internas que no derivaron en despliegues externos. Sin embargo, el contexto regional y la histórica alianza La Habana–Caracas alimentan la sospecha pública: muchos temen que, si la crisis política venezolana escala, el Gobierno cubano intente reforzar a su aliado con personal “de apoyo” que no necesariamente sería anunciado como tropa de combate, y que muy probablemente no envíe nunca, pero que lo muestre para ver si «el enemigo» desiste de intervenir.
Sin embargo, el intercambio en redes dejó ver otra preocupación que es fundamental: la opacidad. Quienes dicen haber recibido citaciones aseguran que no figura con claridad el motivo, más allá de presentarse en fecha y hora. Juristas consultados por este redactor señalan que, en Cuba, el marco legal de la defensa permite convocatorias a la reserva, pero subrayan que cualquier movilización fuera del territorio —sobre todo si implica riesgo— debería ir acompañada de garantías, información precisa y consentimiento expreso.
De momento, todo apunta a un episodio donde el rumor corre más rápido que la información oficial. Lo responsable, para las autoridades, sería aclarar si se trata de ejercicios rutinarios, actualización de expedientes o algo más. Y para los convocados, exigir por escrito el motivo, la duración y el estatus de la citación. En un país exhausto por apagones y carencias, cualquier insinuación de “movilización” tiene un eco político y emocional difícil de contener.
Eso sí: no puede quedar fuera de esta ocasión el hecho de que, según expertos extranjeros, Cuba pudiera estar vendiendo soldados.
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