La subdirectora general de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Johana Tablada, aseguró que el regreso de Cuba en 2021 a la lista de países patrocinadores del terrorismo es la causa del deterioro del nivel de vida de los cubanos en los últimos años, lo que ha llevado a un éxodo sin precedentes.
En una larga entrevista con la web política estadounidense, The Hill, en la Embajada de Cuba en Washington, la funcionaria afirmó que la medida tomada por Donald Trump (2017-2021) antes de abandonar la presidencia “desencadenó, inmediatamente, un flujo desproporcionado de migrantes hacia Estados Unidos”.
Sin hacer alusión a la mala administración de la economía y la resistencia a aplicar reformas económicas a un modelo que ha demostrado con creces su ineficiencia por parte del gobierno cubano, Tablada dijo que la inclusión de la isla en la lista de terroristas, unido a las restricciones ya impuestas, pretende “hacer perfecto el asedio económico y financiero”, para que la economía cubana colapse.
Según la funcionaria de la cancillería cubana, poner al país en la lista obligó a que los bancos extranjeros salieran de la isla por temor a sanciones y agravó la situación económica, que fue lo que llevó al estallido social del 11 de julio de 2021 (11J).
Tablada destacó que las protestas del 11J no lograron derrocar al Gobierno cubano, “pero tuvieron mucho éxito y fueron muy efectivos en dañar a la población”, ya que “más de 200.000 personas emigraron de Cuba en sólo un año”.
Sin embargo, vale recordar que la represión que se desató tras el 11J frenó una flexibilización de la Administración de Joe Biden, quien se había mostrado abierto a eliminar algunas de las sanciones aprobadas por Donald Trump.
En tal sentido, Tablada se refirió, además del “embargo económico”, a “las flamantes más de 200 medidas coercitivas unilaterales de Trump y Biden, que desencadenan la mayor emigración de Cuba a Estados Unidos”.
Asimismo, aseveró que “Estados Unidos tiene relaciones políticas, diplomáticas y económicas con países que están mucho, mucho, mucho más lejos de sus estándares en derechos humanos que Cuba en este momento”.
La funcionaria reconoció asimismo que las relaciones están actualmente estancadas, aunque hay contactos regulares en distintos ámbitos. Si bien La Habana está abierta y dispuesta a una mayor cooperación con Washington, dejó claro que la salida de la lista de países patrocinadores del terrorismo es su prioridad absoluta.
Para Tablada, el gobierno cubano ha evolucionado en muchas cosas, entre ellas la política migratoria, que cambió al permitir los viajes y las salidas de los ciudadanos de la isla.
Cabe resaltar que en mayo de 2023, por tercer año consecutivo, Joe Biden firmó la orden anual que mantiene a Cuba en la lista de países que “no cooperan plenamente” en la lucha antiterrorista.
A la vez, la isla permanece en el listado de estados que patrocinan el terrorismo, cuya actualización aún está pendiente, y tiene consecuencias más graves que la primera.
Según explica el Departamento de Estado, está prohibida la comercialización o el otorgamiento de licencias de exportación de artículos y servicios de defensa con los países que están en la lista de estados que no cooperan en la lucha contra el terrorismo.
Cuando se trata de estados patrocinadores del terrorismo, se penaliza a las “personas y países que entablen tratos comerciales, se limita la asistencia exterior de Estados Unidos, se prohíben las exportaciones y las ventas en el área de defensa y se establece determinados controles a las exportaciones de artículos de doble uso”.
