La implementación apresurada en Cuba del proceso conocido como «bancarización», ha provocado una situación que parece estar saliéndose de control, y ya ni los propios voceros oficialistas del gobierno parecen tenerle fe al proceso, que iba a ser gradual, pero que en la práctica se ha impuesto a rajatabla y en el peor momento posible.
Lázaro Manuel Alonso y Miguel Reyes, periodistas alineados con la postura oficial, parecen estar asistiendo a la muerte en vida de un gobierno que ellos pregonan y defienden, una vez que sus bolsillos han comenzado a sentirse «el golpetazo» de la bancarización.
La preocupación de ambos con la bancarización, es que esta ha traído aparejada una actividad ilegal que ha surgido a raíz del impulso del gobierno a la banca digital. El intercambio de moneda física – billetes – por moneda virtual.
Lázaro Manuel Alonso, asiduo en la Televisión Cubana, lo describió como un nuevo tipo de negocio que aprovecha la escasez de efectivo en manos de quienes más lo necesitan. La práctica parece estar creciendo, particularmente en grupos de Facebook y estados de WhatsApp. Miguel Reyes, por su parte, Hizo hincapié en la necesidad de medidas para hacer frente a la falta de liquidez y mejorar la disponibilidad de efectivo en las calles y pidió un mayor control y regulación de este asunto.
Otro Reyes, pero nombrado Adisley, Superintendente Adjunta del Consejo de la Administración Pública a cargo de Consumidores y Servicios, instó a los cubanos a no participar en estos intercambios dudosos, que se prestan incluso para robos y estafas pero, ¿y el que necesita billetes, qué hace?
Lo cierto es que la bancarización parece habérsele salido de las manos al gobierno. Que exista una tendencia creciente de personas que ofrecen efectivo a cambio de transacciones digitales debido a la escasez de efectivo disponible en los cajeros automáticos, es algo que el régimen debió prever. Que ello desemboque en una actividad ilegal y delincuencial, es algo que debió ser previsto.
Mientras, las quejas del público sobre esta tendencia emergente han estado en curso desde hace un par de semanas.
Los cubanos atribuyen esta situación a las medidas del gobierno de la bancarización, que ha provocado una mayor escasez de efectivo, y por carambola, el surgimiento de prácticas oportunistas han aumentado las tensiones entre la población.
En medio de un escenario complejo, tanto para los ciudadanos como para las autoridades, muchos especulan que tal vez el gobierno quiso recoger el efectivo para cambiar el billete pero, este parece no estar retornando como debería a las arcas del estado.
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Ejemplos prácticos de la mala entrada en vigor de la bancarización
A días de la iniciación del proceso de bancarización, no pocos cubanos están mostrando los efectos perjudiciales que ha tenido en su vida diaria.
Una de esos cubanos que lo ha hecho es Carolina de la Torre, intelectual cubana, y madre de Johana Tablada, Subdirectora general de la Dirección de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba y quien recientemente fuera incluida en la lista de represeres elaborada por la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FDHC).
Carolina compartió en Facebook ejemplos que ilustran los cambios negativos que ha notado a su alrededor debido a la bancarización.
- En su edificio, se requirió un esfuerzo significativo para instalar un motor, pero el costo de los materiales superó los 40 mil pesos cubanos (CUP), difícil de reunir a través de transferencias bancarias.
- Una tienda de charcutería que solía aceptar pagos por transferencia ahora solo acepta efectivo.
- Además de las colas regulares para productos, ahora se agregan las colas en los bancos, lo que resulta especialmente difícil para los ancianos bajo el sol.
- Los ancianos con carritos hacen cola para la gasolina donde no se aceptan pagos en moneda nacional por otros productos.
- La posibilidad de unir colas para diferentes propósitos, como gasolina y farmacia, se ve limitada por la disponibilidad intermitente de productos.
- Los cajeros automáticos locales a menudo están llenos o vacíos, dependiendo de si hay efectivo disponible.
La publicación de Carolina generó una discusión en la que otros usuarios agregaron sus experiencias y opiniones sobre la bancarización.
La nueva normativa, establecida por el gobierno hace unas semanas, limita además las transacciones en efectivo entre empresas a cinco mil pesos cubanos por día. Esto ha impactado negativamente a trabajadores por cuenta propia, empresas de todo tipo, cooperativas y otras formas de gestión.
La bancarización se presentó como una medida para abordar la crisis de escasez de efectivo en la isla, pero los cubanos parecen irse hartando poco a poco de tanta miseria; con un dólar que ha llegado a rozar los 250 CUP x 1.
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