La decisión de Elizabeth Hurley de participar en un proyecto dirigido por su hijo y su posterior revelación sobre cómo se sintió al filmar escenas de sexo bajo su dirección han provocado una discusión más amplia sobre las dinámicas familiares en entornos profesionales.
El video de Meli Princess no solo nos muestra un viaje físico a través de paisajes deslumbrantes y terrenos peligrosos, sino también un viaje emocional lleno de esperanza, sueños y la indomable voluntad de superar adversidades.