El plan de Biden, «para limitar la inmigración ilegal amplía vías seguras, legales y ordenadas para llegar a Estados Unidos y, en su caso, presentar solicitudes de protección, con nuevas consecuencias para quienes no se acojan a estas vías ordenadas», parece estar teniendo resultados, defendió desde EE.UU. su Secretario de Seguridad Nacional, el cubanoamericano Alejandro Mayorkas. Un plan que, sin embargo, no se circunscribe solo a la implementación del Parole Humanitario, sino que también atesora una «colaboración» por parte de las autoridades de México.
Mayorkas, cree firmemente que la consecuente disminución de la llegada de inmigrantes a la frontera sur es un hecho, que ha demostrado que «cuando existe una vía legal y ordenada, la gente se siente menos inclinada a poner su vida en manos de los contrabandistas»; pero claro, si quitásemos de la ecuación a México, ¿qué quedaría?
«Las nuevas medidas se basan en el exitoso modelo utilizado anteriormente para las personas que huían de Venezuela, Ucrania y Afganistán. Desde que se anunció el programa de libertad condicional para los ciudadanos venezolanos, el número de personas procedentes de Venezuela que intentan entrar ilegalmente en Estados Unidos ha seguido disminuyendo de forma significativa», recordó Mayorkas, y expuso como ejemplo que «el número de venezolanos encontrados en la frontera suroeste con México ha descendido de unos 1,100 al día, la semana anterior al anuncio del proceso [de parole humanitario], a una media de 100 al día en enero», reveló.
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Venezolanos a un lado, si nos guiásemos por las publicaciones hechas en las redes sociales por los cubanos, que en los últimos 60 días – por usar un número – parecían abarrotar Facebook con post pidiendo gente para salir de «excursión» o «pesquería», lo cierto es que, al menos los cubanos, parecen desalentados en tomar un bote y escapar del país, conscientes que las puertas, ahora, están cerradas más que nunca.
Y no solo por los EE.UU., país que continua y diariamente ha venido devolviendo en la última semana a la isla a cuanto cubano se encuentra en el mar. Según el último reporte emitido suman ya 5,321 los migrantes cubanos capturados en el mar en su intento por arribar a costas floridanas.
Ayer miércoles, la Guardia Costera de Estados Unidos (USCG) repatrió a 69 balseros cubanos que fueron detenidos en varias operaciones, cerca de las costas de Florida. Horas antes, el martes, la USCG devolvió a Cuba a otros 65 balseros, 55 hombres y 10 mujeres, que fueron devueltos a la isla por el puerto de Orozco, Bahía Honda, Artemisa. La mayoría de estos 65 balseros cubanos son de Artemisa, Matanzas y la provincia de Granma.
Entre los migrantes devueltos se encuentra un grupo de balseros cubanos que fueron detenidos pasadas las 2:00 p.m. el domingo en un precario velero, a apenas unas cinco millas al sureste del Parque John Pennekamp. Es el grupo de cubanos visto en un video divulgado por la Guardia Costera de Estados Unidos (USCG) donde se les exhorta a bajar la vela y ellos, desde el barco, responden que «no se puede».
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También en la ecuación está México, que el martes devolvió a la isla a 94 cubanos que se encontraban en situación irregular en México.
Se trata de la primera operación de devolución correspondiente al 2023, procedente de suelo azteca. En el vuelo fueron retornados a la isla 35 mujeres, 44 hombres y 15 menores. Los cubanos habían emigrado legalmente de Cuba hacía países de Centroamérica y el Caribe y posteriormente emprendieron una ruta ilegal e irregular hacia México para llegar a la frontera sur de EE.UU. La mayoría lo hizo vía Nicaragua.
Un portal oficialista refiere que, de los retornados el martes a la isla, «dos fueron trasladados a los órganos de investigación por encontrarse como presuntos comisores de hechos delictivos de gravedad que estaban siendo investigados antes de que se involucraran en estas salidas ilegales.»
Lo más interesante es que, como parte del Plan de Biden, el mandatario norteño se reunió con su homólogo de México, Andrés Manuel López Obrador. Este, entre otras cosas, le habría insistido en que el problema de los cubanos tiene una matriz en la que EE.UU. incide de manera muy peliguada.
Se desconoce en la totalidad lo que se habló en esa reunión, pero poner un cierre en la frontera sur a cubanos, nicaragüenses, venezolanos y haitianos, no supone solo esfuerzo de los EE.UU., sino también de México.
Ya luego, lo que haga México con los inmigrantes cubanos sorprendidos ilegalmente en su territorio, no parece ser responsabilidad de Biden, que está concentrando en devolver a Cuba a miles de cubanos marcados como deportables.
