La prensa oficial no encontró un espacio este fin de semana para recordar a los dos doctores cubanos secuestrados en Somalia, hace 46 meses este domingo.
Nada se sabe qué suerte han corrido los médicos Landy Rodríguez Hernández y Assel Herrera Correa. Este sábado podría haber sido una buena oportunidad por parte del gobernante Miguel Diaz Canel de tenerlos presentes y mencionarlos en la retahíla de discursos en Campeche mientras su “hermano y amigo” Andrés Manuel López Obrador le pedía más médicos.
Pero el mutismo sigue marcando el prolongado cautiverio de los dos compatriotas raptados con violencia por bandidos el 12 de abril de 2019 en la ciudad fronteriza de Mandera,en Kenya, y trasladados inmediatamente a Somalia a zonas controladas por el grupo islamista Al Shabaab vinculado a Al Qaeda.
Los familiares de Rodríguez y Hernández también se han mantenido alejados de la atención mediática, al parecer por orientación gubernamental.
Las gestiones para su liberación han fracasado hasta hoy pero el silencio sobre el caso las autoridades posiblemente lo justifican como “necesario para evitar que alguna declaración obstaculice conversaciones y negociaciones”.
Así que , aunque ya cansino, el gobierno ha seguido repitiendo en estos cuatro años que junto al de Kenia “continúan los esfuerzos para lograr el retorno seguro a la patria” de los dos médicos cubanos de quienes se rumoró fueron convertidos al Islam por los terroristas.
Es de suponer que continúan conversaciones también con Somalia,más complicadas al no existir embajada cubana en Mogadiscio, su capital. No ha trascendido si otros países se han involucrado en este proceso.
Somalia vive un estado de conflicto y caos desde 1991 cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barre lo que dejó al pais sin gobierno efectivo y en manos de milicias islamistas y señores de la guerra.
El actual gobierno somalí no tiene el control total de su territorio o fronteras, pero además enfrenta el riesgo de que varias milicias armadas en todo el país surgidas contra la amenaza de Al-Shabab pudieran enfrentarse entre sí en una guerra de clanes.
En medio de ese clima de violencia, se encuentran nuestros dos médicos que en su momento advirtieron de la inseguridad de Mandera adonde fueron enviados, un condado kenyano donde los terroristas entran y salen como Pedro por su casa según parece.
El grupo terrorista afiliado a Al-Qaeda desde 2012, tiene un historial de secuestros en el Cuerno de África .Meses antes de la llegada de los dos cubanos a esa zona fronteriza con Somalia, ya Al-Shabaab había secuestrado a un trabajador humanitario italiano en 2018.
Semanas atrás la banda terrorista secuestró a cuatro , entre ellos dos paramédicos de un hospital de Mandera. Desde hace una década, el grupo ha atacado a funcionarios de seguridad, maestros y médicos la mayoría de los cuales ocurrieron en Mandera y las regiones costeras de Kenia.
