Después de despertar preocupación por dejar saber que había estado ingresada en un hospital, la actriz cubana Rachel Cruz explicó cómo “un dolor muy fuerte” la hizo terminar este martes en el Mount Sinai de Miami.
“Yo nunca había sentido un dolor tan fuerte como el que sentí ayer, ni siquiera cuando tuve a mi hija”, expresó Cruz, de 33 años, en sus historias de Instagram, donde contó que tiene cálculos en un riñón. “Tengo piedras. Específicamente tres”.
“Es una de las cosas más horribles que he vivido en mi vida. Pensé que me moría, literal. No podía pararme del piso. Fue horrible”, relató ya fuera del hospital al que “pensé que no llegaba”.
Para la artista, que va “con cierto susto al médico” porque no ha tenido las mejores experiencias en Emergencias: “desde alergias a medicamentos hasta malos tratos”, fue “como una lucecita que permite que las cosas sean menos feas” el llegar “en medio de horas tan espantosas” al Mount Sinai y ser atendida “increíblemente bien”.
“Me recibieron y me atendieron tan bonito que, a pesar de ser una experiencia increíblemente espantosa, me quedo con las sensación del buen cuidado que me dieron y cuánto me ayudaron ayer”, recalcó agradecida “entre tanto dolor”.
“Estoy bien. Tengo medicina por si aparece de nuevo el dolor” que al parecer se debió a que “se estaban moviendo las piedrecitas”, que “son pequeñas, pero son tres”.
No obstante, la joven dijo que orará “por poder deshaceme de ellas por mí misma” y que tendrá que tomar mucha agua. “Es algo que no hago. No tomo nada de agua”, reconoció aunque sabe que es algo que deberá cambiar para mejorar.
Ya más tranquilos tras saber las razones por las que Cruz requirió atención médica urgente, sus allegados y seguidores le desearon una pronta recuperación.
“Luna llena. Muy fuerte. Que te mejores pronto, Rache”; “Vamos, a levantarse de ahí. Y si es necesario tómate una semanita pa ti. Te quiero, Rachel”; y “Vamos, a recuperarse pronto. Tú no eres de estar en cama”, la animaron otras artistas.